Con disciplina y pasión Gabriel es reconocido como el mejor comandante de la banda de guerra infantil de Culiacán.
Por: Jacqueline Sánchez Osuna
El niño Gabriel Eduardo nunca se imaginó que pertenecer a la banda de guerra le iba a cambiar su pensamiento y disciplina, ahora es el mejor comandante de banda de guerra infantil de Culiacán.
Con paso firme y enérgico, digno de cualquier elemento militar, llega Gabriel Eduardo Quintero Cruz a su encuentro con Tus Buenas Noticias. La expresión de seriedad se rompe con una sonrisa al escuchar a sus compañeros decir que va a salir en el periódico de Barrancos.
Una aventura desafiante
Esa sonrisa de emoción hace distinguir más el brillo de sus ojos color café. Durante su conversación, comparte su viaje lleno de desafíos y triunfos junto con su Banda de Guerra. Esa que le ha permitido tener el deseo de ser cada día mejor persona.
"Antes yo no tenía el gusto por la Banda de Guerra, sí me acuerdo de que en alguna ocasión vi algunos videos o en los desfiles los veía, y sí me llamaban la atención pero no me imaginé que algún día yo pudiera estar aquí"
Confiesa Eduardo con una sonrisa llena de orgullo mientras comparte su historia.
Aunque al principio el rigor de la disciplina era un verdadero desafío, Gabriel Eduardo nunca se rindió. "Hubo momentos en los que pensé en renunciar. La disciplina era más intensa de lo que imaginaba, pero mi mamá me recordó que los grandes logros no llegan sin sacrificio", recuerda con gratitud.
Compromiso y dedicación
Guiado por el compromiso y la dedicación de su instructor, Alfonso Muñoz, Gabriel Eduardo comenzó a dar buenos resultados en la Banda de Guerra de su primaria Natalio Landeros Ramos.
"El profe nos inspiró a todos. Nos enseñó que debemos ser constantes y disciplinados, que nada logramos sin esfuerzo, y a mí me ha costado mucho. Antes era más rebelde, ahora creo que soy mejor persona y obedezco reglas"
Dice Gabriel Eduardo, con una expresión de satisfacción.
A pesar de tener apenas un año como integrante de la Banda de Guerra, Gabriel Eduardo ha ido avanzando con paso firme.
Fue seleccionado por el maestro Alfonso Muñoz de entre todos los alumnos de 5to grado. Debido a su entusiasmo y esfuerzo, fue nombrado Corneta de órdenes y dirigía las notas de la banda completa.
Sin embargo, Gabriel Eduardo se ha ido superando día con día. Hoy, además de alcanzar notas muy 'altas', es el comandante. A él lo obedece la banda entera.
Su buena ejecución le valió ser nombrado como el Mejor Comandante Individual de las Escuelas Primarias en Sinaloa durante la Copa Ceforban. Su sueño hecho realidad.
"Fue una experiencia increíble. Mi sueño se hizo realidad. Sentí que todo mi esfuerzo había valido la pena", dice con una voz cargada de emoción al recordar ese momento tan emotivo que lo llevó al borde de las lágrimas.
Ahora, pensando a futuro, Gabriel Eduardo sueña con seguir los pasos de aquellos que sirven a su país.
"Quiero ser militar. La banda de guerra me ha enseñado el verdadero significado del servicio y la lealtad. Es un honor poder contribuir con mi nación de esa manera", dice con una voz cargada de determinación. Su expresión vuelve a ser solemne al hablar de su patria.
Y es que para Gabriel Eduardo la Banda de Guerra no es solo una actividad extracurricular, es su pasión y su inspiración.
"Cada día, me levanto con el deseo de ser mejor que ayer. De seguir creciendo en este mundo de disciplina y llevar el nombre de mi escuela en alto. La banda de guerra es una disciplina que me ha dado más que toques y marchas. Me ha dado un propósito"
Dice para poner fin a la conversación con una sonrisa radiante y llena de compromiso.
Ahora la vida de Gabriel Eduardo marcha con el sonido marcial, con disciplina y pasión hacia nuevos derroteros.