El chile en nogada es un platillo creado por las monjas agustinas del convento de Santa Mónica en Puebla
Por: Faviola Manjarrez
Puebla.- Por representar valores culturales antropológicos, históricos y tradicionales, “La Elaboración del Chile en Nogada Poblano” fue declarada Patrimonio Cultural Intangible del Estado de Puebla.
El anuncio fue hecho en una publicación de un decreto emitido por el Ejecutivo estatal, con lo que se oficializa al platillo como un elemento representativo de la gastronomía poblana, cuya producción está caracterizada por transmitirse en generaciones, con un sentido de identidad y continuidad por realizarse en la entidad con productos agrícolas locales.
Derivado de la labor entre la Secretaría de Gobernación (SEGOB), el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), cocineras de la región de Calpan, San Nicolás de los Ranchos, además de representantes de la industria restaurantera que elaboran dicho platillo, el gobierno estatal promovió la adopción de medidas que salvaguarden las manifestaciones culturales no palpables, que posean un valor especial para la sociedad y formen parte de su identidad.
Tras la publicación de dicho decreto, el gobierno estatal, a través de la Secretaría de Cultura, trabajará en la gestión, trámite y administración de la marca “Chile en Nogada, Orgullo Poblano”, ante el IMPI, mediante la comprobación de elementos como la vinculación geográfica, temporada de elaboración y el procedimiento, que distinguirán la identidad de dicho platillo, lo que facilitará el reconocimiento comercial en los mercados de interés y con ello lograr la certificación.
Cómo son los chiles en Nogada
El chile en nogada es el platillo que, según la leyenda, las monjas agustinas del convento de Santa Mónica en Puebla, elaboraron con los productos de temporada (granada, el chile poblano y nuez de Castilla) para elaborar un platillo que llevara los colores del ejército trigarante; esto con el objetivo de celebrar la Independencia de México y al emperador Agustín de Iturbide.
Este platillo esencialmente consiste en un chile poblano relleno de carne de res y puerco, mezclados con fruta: plátano, manzana, pera, durazno y bañados con una salsa de nuez.
Es considerado como un platillo de temporada y se sirve durante los meses de julio, agosto y septiembre, porque la nuez de Castilla que es la variedad que se emplea en la preparación de la nogada se cosecha durante estos meses, al igual que la granada, otro ingrediente fundamental de este platillo.