Resulta sorpresivo saber que hay jaguares en Sinaloa, por lo que significa una opción turística más para el estado.
Por: Juan Francisco Sotomayor
Resultados del censo del jaguar 2017 reflejan buena calidad de hábitat en el sur de Sinaloa, pese a estatus de peligro de extinción.
Tus Buenas Noticias. La calidad de hábitat en las selvas nativas y el estado de conciencia proteccionista que toman las personas en las comunidades rurales de Sinaloa ha permitido que las poblaciones de jaguar registren buen nivel de conservación y posible aumento.
Yamel Guadalupe Rubio Rocha, investigadora del Universidad Autónoma de Sinaloa precisó que los resultados del Censo del Jaguar 2017 (CenJaguar) revelan que en el sur de Sinaloa existen alrededor de 5 a 10 jaguares por cada 120 kilómetros cuadrados.
En tanto que en el censo del año 2010 existían aproximadamente de 3 a 6 jaguares por cada 100 kilómetros cuadrados, “lo cual significa que el esfuerzo de 10 años haciendo monitoreo en las selvas y educación ambiental en las comunidades ha rendido frutos”, comentó.
La especialista comentó que en 2008 cuando empezaron a monitorear, mucha gente se sorprendía en saber que en Sinaloa hubiese jaguares, y conforme se fueron trabajando los programas de monitoreo con las comunidades y los trabajos de educación ambiental, los pobladores se han vuelto aliados de la conservación.
El monitoreo se hace colocando cámaras trampas que registran fotografía y video de los ejemplares. Para esta iniciativa se apoyan con estudiantes universitarios y los propios residentes de las comunidades organizados en comités, o como voluntarios.
Rubio Rocha explicó que de acuerdo a los resultados del CenJaguar se puede apreciar que en Sinaloa se tienen las poblaciones más grandes de jaguar del norte de México, particularmente las selvas bajas del sur del estado en el municipio de San Ignacio, donde más jaguares se ha monitoreado.
Mencionó que la captura de imágenes y avistamiento de cachorros de jaguar evidencia que también es zona de reproducción de la especie.
Señaló que la principal amenaza para el jaguar sigue siendo la cacería y la destrucción de hábitat con la deforestación. Y explicó que el jaguar vale más vivo por las ventajas que da para el turismo, llevando personas a conocer las selvas donde habita el felino más grande de América.
Los esfuerzos por la conservación del jaguar en Sinaloa se dan con el respaldo financiero de la CONANP y el liderazgo de instituciones educativas como la UNAM en proyectos dirigidos por los investigadores Gerardo Ceballos y Rodrigo Medellín, además del grupo de trabajo de la Alianza Nacional para la Conservación del Jaguar.
Algunos de los esfuerzos institucionales se encaminan a la definición de políticas públicas para la protección de la especie, además de fijación de sitios de paso de fauna en el trazado de carreteras, monitoreo de la especie, y una estrategia nacional que permita la interacción con programas en diferentes sitios de México.
Rubio Rocha comentó que el jaguar es una especie muy emblemática en la cultura mexicana desde los tiempos precolombinos, por lo que este año, decretado como el año de los grandes felinos del mundo, se debe trabajar con ánimo y responsabilidad para proteger a esta especie que es el gran felino de América.