Los proyectos de Topolobampo II y III aportarán 700 MegaWatts cada una
Por: Kenia Meza
Los proyectos de gas natural en Sinaloa tendrán la capacidad para generar 5 mil 161 MW
Con el inicio de operaciones del gasoducto en julio, la central termoeléctrica en Topolobampo de la Comisión Federal de Electricidad empezó a operar con gas natural.
Al igual que Mazatlán, la central termoeléctrica Juan de Dios Bátiz en Topolobampo es una de las primeras beneficiadas por el gasoducto, al cambiar el uso de combustóleo por gas natural.
En su sitio oficial, la Comisión Federal de Electricidad señala que con estas instalaciones aumentará la capacidad de generar energía en 5 mil 161 Megawatts (MW) ya que los proyectos de Topolobampo II y III aportarán 700 MW cada una, Guaymas II y III con 747 MW, Mazatlán aportará 867 MW, y Noroeste IV y V con mil 400 MW.
Todas estas centrales serán suministradas por el gasoducto Norte-Noroeste, el cual cerrará el circuito con el corredor Chihuahua, es decir, que este sistema de gasoductos en el norte abastecerá las centrales termoeléctricas de Sonora y Sinaloa.
Aunado al beneficio económico, la sustitución de combustóleo por gas natural benefició al medio ambiente en Topolobampo, al eliminar las emisiones de humo negro, señaló el presidente de la Federación de Cooperativas Turísticas de Topolobampo, Armando Pinzón Rojo.
En lo que respecta al funcionamiento de la planta de Mazatlán, la termoeléctrica opera con gas natural en un 60 por ciento, y el resto con combustóleo, debido a la problemática presentada con el grupo Yaqui en Sonora.
Actualmente esta planta genera 260 MW y cuenta con tres unidades de energía, de las cuales 2 de ellas producen 158 MW y la tercera 300 MW. Cabe destacar que está en proceso una cuarta unidad que pueda producir 860 MW para satisfacer la demanda de la ciudad.
Con la llegada del gas natural a Sinaloa, se podrán retener empresas y atraer nuevas inversiones privadas para generar empleos y favorecer la derrama económica en el estado, afirmó el secretario de Energía Pedro Joaquín Coldwell.
Imagen: El Debate.