El CAM cuenta con maestros capacitados para guiar a los niños y a los padres de familia al bienestar general.
Por: AnaKaren Castro
Llevan la educación de una manera "especial" desde nivel Preescolar hasta talleres para jóvenes.
Con una gran calidad humana es como cada día el Centro de Atención Múltiple CAM Villa Juárez abre sus puertas para atender con amor y paciencia a 36 niños y jóvenes que se enfrentan diariamente a una discapacidad.
Los niños provienen de diferentes colonias y campos agrícolas de la Sindicatura. Cada uno cargando una historia de vida, en muchos de los casos difícil, ya que no solo se enfrentan a una discapacidad sino también a diferentes situaciones como la pobreza y problemas familiares.
El Síndrome de Down, la ceguera, parálisis, o algún tipo de discapacidad no ha sido impedimento para borrar la sonrisa y ganas de vivir de estos niños que, aunque tienen algunas limitantes físicas, no ponen límites a la hora de mostrar su cariño hacia otras personas.
Dentro de la institución los maestros, psicólogos y especialistas, ayudan a los niños y sus familias, saben que el motor principal de ellos son sus padres, por lo que se les guía para que logren el bienestar de sus hijos.
Ya son 10 años los que lleva la institución en la sindicatura, formando parte del crecimiento y avance de cientos de niños, así como también han sido apoyo para muchos otros que de manera temporal han estado en el CAM y después son reubicados en otras escuelas.
El director del plantel Samuel Araujo Romero, destacó lo que significa contar con esta escuela en Villa Juárez, ya que hay muchos niños y jóvenes con discapacidad se perderían de incluirse a la escuela pública y a la vida diaria.
Externó que durante el tiempo que lleva en función la escuela han sido parte de muchas historias de crecimiento, y reafirma el compromiso que tienen con sus estudiantes. Muchos de ellos han sido rescatados del encierro y del rezago social, ya que no los pueden llevar a otra escuela ni convivir con personas de su edad.
Al crecer los niños y terminar con su etapa escolar, forman parte de los talleres en donde les enseñan manualidades y puedan realizar artículos para vender entre sus conocidos y vecinos de la escuela, como paletas de chocolate, adornos y coronas para el día de muertos.
Con estas actividades pueden incluirse en la vida laboral y ganar dinero, lo que los hace sentirse más útiles y continúen desarrollándose como personas adultas.