Los reos serán trasladados a centros de readaptación social.
Por: Kenia Meza
Los reos serán trasladados a centros de readaptación social
En un esfuerzo por modernizar y transformar el sistema penitenciario mexicano, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) anunció el cierre del penal Puente Grande, ubicado en el Estado de Jalisco.
El documento, publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF), firmado por el titular de la SSPC, Alfonso Durazo, establece que “las personas privadas de la libertad que alberga el Centro Federal de Readaptación Social número 2 Occidente serán trasladadas a los centros federales de readaptación social que determine el comisionado de Prevención y Readaptación Social, quien realizará las acciones y gestiones necesarias para ello, respetando en todo momento sus derechos humanos”.
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Asimismo, señala que los derechos de los trabajadores del penal “serán respetados conforme a la ley, por lo que serán reubicados en otros centros penitenciarios federales que determine el comisionado de Prevención y Readaptación Social, de acuerdo a las necesidades del servicio de la institución”.
El documento indica que la SSPC será la dependencia que determinará el destino final del inmueble que ocupaba la prisión.
Por tanto, esta medida está encaminada al cumplimiento del Plan Nacional de Desarrollo en su objetivo número 7, que señala que la Recuperación y Dignificación de las Cárceles precisa la necesidad de que las instalaciones penitenciarias cuenten con la infraestructura, recursos humanos y materiales suficientes para atender a la población penitenciaria que se alberga en los centros penitenciarios federales.
Además de la necesidad de “generar acciones para la modernización y reingeniería en materia penitenciaria, privilegiando lo establecido en el artículo 18 de la Carta Magna que señala que el sistema penitenciario se organizará sobre la base del respeto a los derechos humanos, el trabajo, la capacitación para el mismo, la educación, la salud y el deporte como medios para lograr la reinserción del sentenciado a la sociedad y procurar que no vuelva a delinquir, por lo cual, con esta acción de desincorporación se facilitarán los mecanismos y actividades para lograr la reinserción social de las personas privadas de su libertad”.