El ser humano busca su supervivencia y su superación independientemente del lugar geográfico en el que se encuentre.
Por: Miguel Calderón
Columna: Reflexiones de un aspirante a buen vecino. Por Miguel Calderón.
George Soros desde Hungría y Elon Musk desde Sudáfrica son sólo 2 casos, que son la cara exitosa de la migración hacia Estados Unidos. Las historias que no logran este éxito son más abundantes, habiendo trágicos episodios en más de una.
En algunos puntos de nuestra ciudad podemos ver a migrantes con banderas de países centroamericanos y cartulinas con frases escritas solicitando ayuda humanitaria. Las escenas más conmovedoras son en las que se observan niños y bebés de brazos.
Lee: Corrupción, migración y narcotráfico, reto de paz en América Latina
Registré todo esto por la oportunidad que me dio Felipe Mier de documentar parte de su historia personal para mi canal de YouTube. Felipe está muy lejos de ser un Elon Musk o un George Soros, pero sin duda es una persona de éxito profesional y familiar que tiene relación con la necesidad de migrar de un lugar a otro.
El padre de Felipe, Herminio, es originario de Puebla y tuvo que ir en la búsqueda de mejores horizontes. Fue la migración lo que lo trajo a los campos agrícolas de Sinaloa. En uno de esos campos nació Felipe y sus hermanos.
En su infancia, porque lo generado por sus padres no era suficiente y porque la Ley lo permitía en aquel entonces, formó parte de una cuadrilla de trabajo que se metía entre los surcos.
Este grupo de infantes que debía estar en el kínder, pero que trabajaban cual adultos fue conocida como los pitufos. Felipe se recuerda así soltando una carcajada.
Recomendamos leer
https://tusbuenasnoticias.com/reflexiones-del-lector/controlando-emociones-negativas/Según datos de Naciones Unidas, el año pasado hubo más de 270 millones de personas que tuvieron que moverse de su lugar de origen a algún otro destino por diferentes motivos. Más 160 millones fueron por motivos laborales.
De todos los trabajadores migrantes, 68,1 millones eran mujeres, es decir aproximadamente el 41,6% del total mundial. Los hombres sumaban 95,7 millones, o el 58,4% del total.
El ser humano busca su supervivencia y su superación independientemente del lugar geográfico en el que se encuentre. El caso de Felipe, que logró graduarse de Ingeniero Civil frente a grandes dificultades, está ubicado en Villa Juárez, Navolato.
Platica que cuando joven dos de sus compañeros de jornal en un sábado de raya se dirigieron a la tiendita de la agrícola con la intención de comprar comida chatarra y un refresco. Él se quedó a la expectativa y les compartió que no podía darse esos lujos porque lo que ganaba por su trabajo sería utilizado para sufragar el costo del transporte público para llegar a la Universidad.
Hoy Felipe es el líder de una empresa familiar que comprende una gran constructora, una concretera y un restaurante. En ese camino se hizo de ese patrimonio empresarial, además de construirle vivienda digna a sus padres y hermanos.
Felipe dice que ha sido clave el estudio, el amor al trabajo y el respeto. Vengas de donde vengas y vayas a donde vayas, esa es su fórmula de la buena vecindad para el Ingeniero Mier. Con el estudio y el amor al trabajo, Felipe es un trofeo de la migración.