El maravilloso proyecto, impulsado por Nacional Monte de Piedad en colaboración con Parques Alegres, celebró su exitoso final de cursos en la Unidad Deportiva Progreso Los Ayales en Culiacán
Por: Juan Madrigal
Culiacán, Sinaloa.- "Sin música, la vida no tendría ritmo" y "El baile no es quien lo hace mejor, es quien lo disfruta" fueron algunas de las inspiradoras frases que resonaron en el exitoso cierre de cursos del proyecto “El Parque es Mío”, organizado por Nacional Monte de Piedad en colaboración con Parques Alegres.
Diversión y aprendizaje en el Parque Progreso Los Ayales
El evento tuvo lugar en la recién construida techumbre en la Unidad Deportiva Progreso Los Ayales, donde niños y niñas compartieron lo aprendido durante varios meses en talleres gratuitos de pintura, guitarra, zumba, club de tareas y manualidades.
La ceremonia de entrega de constancias estuvo llena de emotividad y reconocimiento, en la cual se agradeció a los docentes que dejaron una huella significativa en cada uno de los participantes.
Los instructores, Demetrio Estrella, Sandra León, Rosangela Aceves Borroel, Francisco Javier Neyoy y Patty Hernández Villela, junto a Lilia Carolina López Ceniceros, directora general de Parques Alegres, y Celene Arias, asesora de la misma institución, felicitaron a las y los artistas graduados por su dedicación y esfuerzo.
Durante el evento, los asistentes disfrutaron de una presentación musical a cargo de los estudiantes del taller de música, quienes compartieron su talento, mientras que las alumnas del taller de zumba cautivaron con sus movimientos de baile.
Los estudiantes de pintura y manualidades, así como los del club de tareas, también realizaron una exhibición de sus trabajos, mostrando el gran aprendizaje y las habilidades adquiridas.
Sandra León, maestra y presidenta del comité, expresó: "Es un honor formar parte de este hermoso proyecto, y compartir este logro de los alumnos, maestros y comité. Agradezco a Nacional Monte de Piedad y Parques Alegres por apoyar este tipo de iniciativas que reflejan un compromiso con la infancia y el fortalecimiento del tejido comunitario en el sector popular."
Como parte de la celebración, cada niño y niña recibió su constancia, junto con una bolsa de dulces donados por el DIF Municipal. Además, todos pudieron disfrutar de un delicioso banquete, que incluyó cupcakes, pozole y refrescos, acompañados de la calidez de la comunidad.
La agrupación norteña Pacto de Honor puso a todos los presentes a bailar con su alegre repertorio musical, creando un ambiente de alegría y unión en esta memorable jornada.
Con cada paso de baile, con cada nota musical y con cada pincelada, los participantes de “El Parque es Mío” demostraron que el arte tiene el poder de transformar, de conectar y de inspirar.
Este evento, que marcó el cierre de una etapa de aprendizaje y crecimiento, también abrió las puertas a nuevas posibilidades. Al final, no se trató solo de las habilidades adquiridas, sino del entusiasmo, la dedicación y la alegría con la que se vivieron cada uno de los momentos.
Como lo expresó el niño Gael Sánchez, el compromiso con el aprendizaje es solo el inicio de un camino lleno de oportunidades.
Y como bien recitó la niña Ana Nicol, “sin música, la vida no tendría ritmo”; sin embargo, con proyectos como este, la vida se llena de un nuevo significado, donde la esperanza, la comunidad y el arte se entrelazan para ofrecer a los niños, niñas y jóvenes un espacio para crecer, soñar y expresarse.
Hoy, más que nunca, queda claro que el verdadero éxito no radica en ser el mejor, sino en disfrutar el proceso, compartir y crecer juntos. El parque es de todos, pero sobre todo, el futuro es de los niños y niñas que siguen soñando, aprendiendo y bailando con el corazón.