Podemos ayudar a cuidarlos por medio de las limpiezas periódicas de los ríos que cruzan estas enormes barrancas, evitar la tala y construcción dentro de las mismas
Por: Miguel Burgos Martínez
Cuernavaca, la Ciudad de la Eterna Primavera, reconocida por su clima paradisiaco, alberga un tesoro único y en peligro: el Cangrejito Barranqueño, bautizado así por su hábitat en más de 200 barrancas que rodean la ciudad. Este pequeño crustáceo de agua dulce, científicamente conocido como Pseudothelphusa dugesi, es endémico de Cuernavaca, encontrado exclusivamente en algunas de sus barrancas.
A pesar de su modesto tamaño, alcanzando apenas 5 cm de longitud, el Cangrejito Barranqueño desempeña un papel vital en el ecosistema de las barrancas. Su dieta se basa en la descomposición de materia orgánica, incluyendo hojas y restos de animales, contribuyendo al proceso de limpieza del fondo de las barrancas. Sin embargo, su existencia está amenazada por la contaminación y la pérdida de su hábitat debido a la descarga de aguas negras y objetos contaminantes.
La Universidad Autónoma del Estado de Morelos, liderada por el biólogo Diego Viveros, ha emprendido esfuerzos de conservación para proteger al Cangrejito Barranqueño. A través de monitoreo de poblaciones y estrategias educativas, buscan preservar este tesoro único y fomentar la conciencia sobre la importancia de cuidar las barrancas de Cuernavaca.
En un contexto donde la biodiversidad enfrenta desafíos, la conservación del Cangrejito Barranqueño se convierte en un acto crucial para mantener la riqueza natural de la Ciudad de la Eterna Primavera.
Nosotros como habitantes de esta maravillosa ciudad tenemos en nuestras manos el poder mantener y conservar el hábitat natural de esta especie de gran tamaño (en espíritu). Podemos ayudar a que se evite su extinción por medio del cuidado de las barrancas avisando de descargas de desechos clandestinos y mantener las barrancas lo más limpias posibles.
También podemos ayudar a cuidarlos por medio de las limpiezas periódicas de los ríos que cruzan estas enormes barrancas, evitar la tala y construcción dentro de las mismas (para evitar el daño y fertilidad del terreno, junto con deslaves, etc.).
Lee también: Flores para Todos: Una nueva forma de proteger el medio ambiente.Lee también: ¡Rescatemos a los animales callejeros en Estado de México!Lee también: Cuántos corazones tiene un pulpo