Por: Jesús Salvador Martínez Bastidas
Uno de los peces más comunes que puedes observar en Sinaloa es una especie llamada Lisa, aunque en algunos lugares también lo llaman Múgil, Mújol, Muble y Mule. Pero su nombre científico es Mugil cephalus pertenece al grupo de peces teleósteos y al orden muljiformes.
Las Lisas son peces pequeños que regularmente miden entre 30 a 80 cm, estas tienen la cabeza verticalmente comprimida, el cuerpo de sección cilíndrica y el dorso de color entre grisáceo y plateado.
El Mugil cephalus pertenece a la familia Mugilidae y habita en las aguas costeras de la mayoría de las regiones tropicales y subtropicales. Lo podemos encontrar desde Nueva Escocia hasta Argentina, Golfo de México, Golfo de Vizcaya hasta el sur de África. Se encuentra también en todo el Mar Mediterráneo y en el Mar Negro. La distribución del Pacífico oriental abarca desde el sur de California hasta Chile.
Su distribución geográfica es amplia, siendo muy común en aguas costeras debido a sus características, que le permiten soportar temperaturas elevadas, salinidades variables y ciertos niveles de contaminación orgánica.
Según la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural la Lisa se reproduce en 17 estados de la República, siendo los principales: Tamaulipas con más de 3 millones 297 mil kg, Nayarit con 2 millones 801 mil kg y Sinaloa con más de 2 millones 572 mil kg. La producción nacional en el 2020 fue de 12 millones 487 mil 221 kg.
Lee también: Polialuminio, infraestructura y medio ambienteDentro de sus curiosidades este pez se caracteriza por hacer las cosas con moderación y su control de la voracidad. Ya que no depreda a otros peces y animales marinos vivos, su alimento lo encuentra exclusivamente en peces muertos que él mismo comprueba de un coletazo si lo están o no antes de comérselos.
Los peces se caracterizan por aportar diferentes nutrientes a los humanos, en el caso de la Lisa aporta: omega, proteínas, potasio, calcio, magnesio, hierro, entre otros.
Afortunadamente durante todo el año la podemos encontrar la Lisa disponible en el mercado nacional. Sin embargo, aunque es una especie de preocupación menor hay que brindar un manejo sustentable al cuidar sus poblaciones y darles tiempo para recuperarse, así como también cuidar sus ecosistemas, de esta manera podemos asegurar que no sean escasas en el futuro.