Niños y niñas es muy importante ser muy responsable y elegir bien lo que quieran, porque son decisiones que ayudan a la economía de sus papás
Por: Juan Madrigal
Desde temprana edad, es importante inculcar la responsabilidad del consumo. La capacidad de elegir sabiamente no solo beneficia al individuo, sino que también contribuye significativamente a la economía familiar. Al optar por productos y servicios de manera consciente, los niños y jóvenes no solo satisfacen sus necesidades y deseos, sino que también fortalecen el flujo económico interno, apoyando así la estabilidad financiera de sus padres y el bienestar general de la familia.
¿Qué es el consumo responsable?
Es cuando piensas si quieres algo para usarlo porque te sirve o si solo lo quieres, porque los demás también lo tienen, pero no lo usas.
¿Para qué compramos cosas?
Para satisfacer las necesidades indispensables que requerimos para nuestra supervivencia, ya sean:
- Para nuestro cuerpo: Como el hambre, la sed o el abrigo.
- Para convivir: Pertenecer a un grupo, como de algún deporte, música o algún juego de moda. Otras: Salud, educación, vivienda, transporte, seguridad, comunicación y recreación.
¿Qué pasa cuando no piensas antes de comprar?
Puede ser que tengas muchas cosas que no aprovechas. Esto en ocasiones puede dañar el medio ambiente porque lo que no utilizas acaba en la basura, además del gasto innecesario que representa para tu familia.
Tú también eres un consumidor
Al ser un consumidor, tomas decisiones de compra, como elegir:
- -La ropa que te gusta.
- -El juguete o videojuego de tu agrado.
- -La mochila o lonchera de moda.
Consume responsablemente
Antes de pedirle a tus papás que te compren algo, pregúntate:
- - ¿Para qué quiero ese juguete o videojuego?
- -¿Realmente lo necesito?
- -¿Vale la pena renunciar a otras cosas por este juguete?
- -¿Qué otras opciones hay disponibles sobre lo que quiero comprar?
- -¿Qué consecuencia tendrá en mis finanzas (o en la de tus papás) y en el medio ambiente?
Recomendaciones:
Reparte tu “domingo”. De esta manera aprovecharás mejor tu dinero.
Compara lo que más te sirva. De este modo podrás elegir lo que más te convenga y de acuerdo a tus necesidades y recursos.
Escoge lo que te hace bien. Ya sea en el presente o en un futuro próximo.
Aprende de las veces pasadas. Entre más conozcas sobre las cosas que estás considerando comprar, como sus características, calidad y precio, podrás hacer elecciones más acertadas. Primero lo importante. Compra primero lo que realmente necesitas, después podrás darte algún gusto.
¿Te sirve o solo lo quieres? Pregúntate si eso que quieres te hace falta o solo lo quieres tener. Piensa y busca. Infórmate, ya sea con tus papás o alguien de tu confianza para que te oriente antes de que tomes alguna decisión.
Fuente: Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).