Gracias a la donación de sillas y mesas por parte del Instituto Senda del Río, en colaboración con el Ayuntamiento de Culiacán y Sepyc, el plantel ubicado en la colonia Renato Vega Amador, mejora sus condiciones educativas
Por: Juan Madrigal
Culiacán, Sinaloa.- La educación es una herramienta clave para transformar vidas y construir un mejor futuro. Brindar a los estudiantes las mejores condiciones de aprendizaje es fundamental para que puedan desarrollarse plenamente. En este contexto, los alumnos y docentes de la escuela primaria Juan M. Banderas celebran con gratitud la reciente donación de mobiliario.
Gracias a la gestión realizada por el director Mario Medina Meza ante la Secretaría de Educación Pública y Cultura (Sepyc), la escuela, ubicada en la colonia Renato Vega Amador, recibió 70 sillas, mesas para alumnos, además de dos mesas y dos sillas para maestros, junto con dos pintarrones. Esta donación responde a la necesidad de mejorar las condiciones de estudio en el plantel.
Por una educación digna
Medina Meza también destacó el apoyo recibido por parte del Instituto Senda del Río, a través del programa "Adopta una Escuela", impulsado por la Dirección de Participación Social del Ayuntamiento de Culiacán. La colaboración de Luz María Lugo Sánchez fue crucial para que la escuela recibiera al inicio del ciclo escolar la donación de mobiliario.
Este tipo de iniciativas no solo aportan recursos tangibles, sino también un impulso moral a la comunidad educativa. "En nombre de la escuela, agradecemos este gran apoyo, que nos motiva a seguir trabajando arduamente por nuestras niñas y niños", expresó el director.
Los alumnos beneficiados manifestaron su entusiasmo por contar ahora con un espacio adecuado para su aprendizaje.
Jesús Antonio, uno de los estudiantes beneficiados, expresó su alegría por tener una nueva silla y mesa, pues el mobiliario anterior estaba en malas condiciones. Ahora, su espacio de estudio incluye hasta un lugar para guardar sus útiles.
Cada silla, mesa o pintarrón entregado en la escuela Juan M. Banderas es un símbolo de progreso y un impulso para que las y los estudiantes sigan construyendo su futuro. Con un ambiente adecuado y digno, estos niños y niñas pueden desarrollar todo su potencial y alcanzar sus metas educativas.