María Reyes es un ejemplo de trabajo humilde, dignidad y fortaleza en la búsqueda de un futuro mejor en las calles del sur de Culiacán
Por: Juan Madrigal
Culiacán, Sinaloa.- María Reyes, una mujer de 48 años originaria de la sierra de Badiraguato, recorre a diario las calles del sur de Culiacán en busca de “fierro viejo” o latas de aluminio. Su objetivo es obtener ingresos que le ayuden a subsistir, haciendo frente a las dificultades económicas que enfrenta en su día a día.
Hace más de siete años, María se trasladó a Culiacán con su familia en busca de un lugar más seguro para vivir. A pesar de las adversidades, ha logrado adaptarse a este oficio, demostrando una gran perseverancia y dedicación para salir adelante.
Extraña su tierra natal
Recuerda con nostalgia los días que pasaba en su hogar en Badiraguato, rodeada por la naturaleza, disfrutando del canto de los pájaros y de los manjares que ofrecían los árboles frutales en su tierra natal. "Si extraño mucho a mi casa de Badiraguato", expresó con un tono melancólico.
Cada mañana, María sale temprano desde su hogar, empujando una carriola que le regaló un hombre de buen corazón. Con ella recorre las calles cercanas a la colonia Las Coloradas, como Renato Vega Amador, 5 de Febrero, Amistad, 21 de Marzo, Revolución, Zapata y Guadalupe Victoria, en busca del material que le permita obtener algo de dinero para sobrevivir.
“Ya no es tan fácil encontrar fierro viejo o latas, y menos aún encontrar cosas en buen estado que sirvan para vender”, comentó María. Explica que cada vez son más las personas que se dedican a este oficio, lo que hace la competencia más difícil.
A pesar de las dificultades, María no pierde la esperanza. Cada día sale con fe, dispuesta a encontrar algo de material reciclable que le permita venderlo a la empresa "Casa Corona", que es donde mejor le pagan por su trabajo.
María es un ejemplo de tenacidad y fortaleza
A pesar de no tener un empleo formal, ella se las ingenia para obtener ingresos que le permitan mantener su hogar. Su día comienza al amanecer, enfrentándose al sol y las inclemencias del tiempo.
Esta mujer, que ha luchado por sobrevivir en la ciudad después de haber dejado su hogar, demuestra que la resiliencia y el esfuerzo son claves para salir adelante. Aunque las condiciones no siempre son fáciles, María sigue buscando oportunidades para mejorar su situación y seguir adelante con su vida.
La historia de María es un ejemplo claro de resiliencia y sacrificio. Cada día se levanta con la esperanza de que su esfuerzo será recompensado, demostrando que incluso en las situaciones más difíciles, la tenacidad y la perseverancia pueden transformar la adversidad en una oportunidad para seguir adelante.