Ricardo Laureán inyecta vida al futbol infantil de Los Ángeles en Culiacán

El promotor deportivo, Ricardo Laureán, lidera con pasión y disciplina la escuelita Real Lobos al nororiente de Culiacán

Por: Francisco Castro

En el corazón del fraccionamiento Los Ángeles, una cancha de césped sintético es el escenario donde los sueños de decenas de niños cobran vida. Ahí, Jesús Ricardo Laureán García, un entrenador y promotor deportivo de 32 años, lidera con pasión la escuelita de fútbol Real Lobos.

Con 68 jugadores inscritos, desde pequeños de cuatro años hasta adolescentes de 16, su labor no solo es formar futbolistas, sino también fomentar valores y disciplina en los jóvenes.


Un sueño que nació en 2021

Ricardo inició su trayectoria como promotor deportivo en 2021, en la colonia Emiliano Zapata. Sin embargo, el destino lo llevó al fraccionamiento Los Ángeles, donde encontró un terreno fértil para desarrollar su pasión.

"Cuando se me brindó la oportunidad de venir aquí, no lo dudé. Me ha ido mejor", comenta.

Desde entonces, ha trabajado arduamente para consolidar su proyecto, que incluye no solo entrenamientos regulares, sino también la organización de torneos como la Copa Ángeles.

La Copa Ángeles, una competencia de fútbol que se juega entre semana, reúne a 20 equipos en la categoría libre. "Cuando empezamos, el campo era de tierra. Hoy, con la cancha de césped sintético, hemos dado un gran paso", destaca Ricardo.

Los niños juegan fútbol 8, mientras que los adultos disfrutan del fútbol 7, en una dinámica que fortalece la comunidad al nororiente de Culiacán.

La formación como trofeo

Para Ricardo, su mayor satisfacción como entrenador no está en los trofeos físicos, sino en los logros de sus jugadores. "Mis trofeos son los niños que debutan, que son seleccionados o que llegan a un equipo más grande", afirma con orgullo.

Su escuela, aunque pequeña, ha visto a jóvenes formados por él representar a Culiacán e incluso ingresar a equipos como Dorados.

La formación de jugadores no es nueva para Ricardo, quien comenzó en este campo a los 18 años. Aunque se apartó por un tiempo debido a compromisos laborales y familiares, nunca perdió el amor por el deporte.

Hoy combina su trabajo como asesor de crédito en una empresa de calzado con su pasión por el fútbol

"Trato de venir todos los días; vivo cerca y eso me permite dedicarles tiempo a los niños", explica.


Inspiración y consejos

El ejemplo de Paco Salas, su entrenador en la escuela Monarcas Morelia, hoy Cañoneros, marcó su visión del fútbol. "Paco fue mi ejemplo a seguir. Aunque como jugador no tuve la oportunidad de ir a un club, ahora mi meta es ayudar a los niños a lograrlo", reflexiona.

A los pequeños que sueñan con ser futbolistas y a sus padres, Ricardo les comparte un mensaje claro: "Los sueños se cumplen con disciplina. Hay que trabajar todos los días y no quitar el dedo del renglón".

Este principio es el que busca inculcar en cada entrenamiento, donde enseña que el éxito en el fútbol y en la vida requiere esfuerzo constante.

La labor de Jesús Ricardo Laureán va más allá de la formación deportiva. Es un ejemplo de cómo la pasión y el compromiso pueden transformar vidas y revitalizar comunidades.

En el fraccionamiento Los Ángeles, su trabajo está dejando una huella imborrable, demostrando que el deporte no solo construye atletas, sino también personas con valores sólidos y sueños claros.

Es un líder que enseña disciplina y forma personas de bien.