Desde niña Itzel tenía la inquietud de ayudar a las personas desinteresadamente. Hoy a sus 25 años siendo ya un médico general forma parte de los socorristas de Cruz Roja Culiacán
Por: Faviola Manjarrez
Culiacán, Sinaloa.- Este 21 de febrero Cruz Roja cumple 113 años de ayudar, de ser una esperanza de vida y consuelo para millones de personas. Hoy en este día es importante reforzar la misión de esta benemérita institución que también ha formado a grandes paramédicos. Tal es el caso de Itzel Rubí Valenzuela, quien a la edad de 15 años supo que quería ser parte de Cruz Roja. Desde niña tenía la inquietud de ayudar a las personas desinteresadamente. Hoy a sus 25 años siendo ya un médico general forma parte de los socorristas de Cruz Roja Culiacán, que día a día salvan la vida de un sinfín de personas.
Rubí Valenzuela y su ingreso a Cruz Roja
Para entrevistar a Rubí acudimos a las instalaciones de Cruz Roja, Culiacán que están ubicadas por el bulevar Madero. La vimos llegar portando su uniforme con gran orgullo y lista para empezar a narrar a Tus Buenas Noticias lo que ella hace dentro de esta institución.
“Actualmente, tengo 25 años de edad y hace 10 años estoy dentro de Cruz Roja. Todo empezó cuando estaba en la prepa, recuerdo que se anunció un curso de Cruz Roja para poder liberar tu servicio social de la preparatoria. Sin embargo, yo estaba en primer año y no necesitaba liberar el servicio social, pero inicié en el área de juventud donde aprendí primeros auxilios, me gustó e ingresé.
En el área de juventud ayudas al prójimo, entregamos despensas, apoyamos a personas en abandono, visitamos poblaciones marginadas para llevar alimentos o visitar a personas mayores que viven solos y que no pueden realizar tareas domésticas, nosotros les ayudamos, y si necesitan que alguien les ayude a limpiar sus casas lo chacemos, y también visitábamos campos agrícolas.”, narra Itzel Rubí con gran orgullo.
En área de Juventud Itzel cumplió su ciclo y siguió preparándose dentro de Cruz Roja, entonces inició a prepararse como médico Técnico en Urgencias Médicas, mientras también se preparaba en la carrera de Medicina en la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Actualmente, ella está en el área de socorros donde tiene cuatro años salvando vidas.
Ser paramédico requiere pasión
“Dejé mucho… sacrificas familiares, festejos con amigos, pero, pues cuando algo te gusta lo haces con amor, mi familia me ha apoyado por esa pasión que siento por Cruz Roja. Siempre hay miedo cuando vas a un servicio, vas a lo desconocido”, dice Itzel, quien también nos platicó una de las experiencias que ha vivido en Cruz Roja y que le ha dejado aprendizaje.
Itzel nos relató que un día que ya había terminado su turno, se presentó un servicio urgente y aunque ella ya no estaba en horario se le convocó por falta de personal, a lo que ella acudió sin titubeo.
“Había un servicio de un choque, se decía que había personas graves, en una taquería, lo hice porque te llama, no puedes decir no, alguien te necesita afuera. La primera persona que me pidieron apoyo era para una trabajadora de la taquería, del lado mío llega una persona y me dice, verdad que ya no tiene signos vitales y le contesté quién eres tú, es mi esposa, me quedé paralizada, tú trabajando haciendo tu rutina y a veces por alguien más llegas a perder la vida.
Trabajando llegas a perder la vida de una manera que no lo esperas, su pareja sentimental estaba al lado mío, pero yo no supe como decirle que no había vuelta atrás”. Dijo Itzel.
“Cruz Roja es para mí otra casa, otra familia, he encontrado a mis mejores amigos, en Cruz Roja hago lo que me gusta. Hay gente que está esperando que yo los ayudé, y yo me quedo por eso”.
Ayudando a los demás Itzel cumple su sueño de niña. Ahora como profesional de la medicina tiene mejor conocimiento para auxiliar oportunamente… por sus manos corre la vida.
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Si deseas donar a Cruz Roja lo puedes hacer en este enlace. https://www.cruzrojamexicana.org.mx/
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