Un grupo de músicos en el crucero de las avenidas México 68 y Álvaro Obregón en Culiacán, encuentran en la música no solo una forma de expresión, sino también el sustento necesario para sus familias
Por: Juan Madrigal
Culiacán, Sinaloa.- Ante la incertidumbre que envuelve a la capital sinaloense, un grupo de músicos ha decidido convertir la adversidad en una melodía de esperanza. Con el ritmo vibrante de la tambora como su aliada, salen a las calles a llevar alegría a los corazones, mientras encuentran en cada nota no solo una razón para sonreír, sino también el sustento necesario para sus familias.
Melodías de esperanza en Culiacán
Óscar Zatarain (tambora), Candelario y Jesús Ochoa (clarinete), Javier Quintero (tuba), Humberto Quintero (tarola), Carlos Quintero (trompeta), Gregorio Quintero (trombón) y Juan Carlos Zatarain (armonía), unidos por su pasión por la música, se esfuerzan por salir adelante ante la adversidad.
En entrevista con Tus Buenas Noticias, los músicos compartieron que, ante la falta de oportunidades laborales, decidieron salir a las calles para regalar momentos de felices a quienes los escuchan. A través de sus melodías, también buscan el apoyo solidario de la ciudadanía, cuya generosidad les permite llevar el "pan de cada día" a sus hogares.
El grupo de músicos se instala en el cruce de las avenidas México 68 y Álvaro Obregón, en el sur de Culiacán. Allí, comparten su música con los transeúntes, interpretando melodías como:
- “Palillos Chinos”
- “Sinaloense”
- “Muchacho Alegre”
- "La Cuichi"
- "El Manicero"
- “Duende Negro”
- "Camarón Pelao"
- "Son de los Aguacates"
- "Linda Güerita"
- "La Yaquesita"
El apoyo económico que reciben de las personas que aprecian su música es repartido de manera equitativa entre todos los integrantes del grupo. Cada moneda y cada gesto de generosidad es compartido por igual, reflejando la unión y la solidaridad que los caracteriza como equipo.
Javier Quintero, manifestó su profundo agradecimiento por el respaldo que les brinda la ciudadanía. "Agradecemos la valiosa ayuda de la gente, que no dudan en apoyarnos, ya que entienden la difícil situación que vivimos al quedarnos sin trabajo", comentó.
Adversidad musicalmente convertida en esperanza
Este grupo de músicos llega alrededor de las 12:00 p.m. al cruce donde tocan por un par de horas. Después, regresan a sus hogares, ubicados en colonias cercanas al lugar donde se establecen. Durante ese tiempo, llenan los corazones de los transeúntes con el sonido vibrante de los instrumentos de viento.
Pese a la adversidad, los músicos aseguran que mientras continúe la falta de oportunidades laborales, seguirán saliendo a las calles. Tienen la firme determinación de buscar el sustento necesario para mantener a sus familias y no dejar que las dificultades los desanimen.
La música es un lenguaje que une corazones, y en Culiacán, el eco de la solidaridad resuena más fuerte que cualquier adversidad. Cada gesto de apoyo es una nota que compone la melodía de esperanza que estos músicos nos regalan. Porque juntos, siempre podemos superar cualquier desafío.