Con verduras de traspatio Yadira y Juan cumplen 25 años de comerciantes en Villa Juárez

EMPRENDIMIENTO EN LOS SOLARES

Por: Juan Francisco Sotomayor

Iniciaron como jornaleros y encontraron el negocio de su vida sembrando hortalizas que venden todos los días en su motocarro “La Perrona”.

En la vida hay oportunidades de empleo para todos, sólo se necesita dedicación. Yadira y Juan siembran verduras en traspatio, se hicieron comerciantes empleándose por sí mismos. Con su motocarro “La Perrona”, llevan 25 años abasteciendo de verduras frescas a familias de Villa Juárez.

No se necesita ir a una escuela de negocios para hacer una empresa, se requiere dedicación, persistencia y ganas de trabajar. Yadira Audelo Zamudio y Juan Guadalupe León Ramos se conocieron andando de jornaleros en los campos agrícolas. Ya de casados decidieron poner un negocio propio. Sólo hicieron lo que saben hacer, cultivar hortalizas.

Juan León es originario de la sindicatura de Jesús María, en los altos de Culiacán, pero desde que se casaron viven en la sindicatura de San Pedro, Navolato, donde son muy conocidos por tener verduras todo el año en sus solares. Son expertos en sembrar lechuga, rábanos, cilantro, cebollas y otras hortalizas comunes.

Las lechugas llevan un proceso especial dice Yadira, tienen una semilla muy pequeña, se hace la siembra directa, y ya que desarrollan las primeras hojas al mes se deshija y se trasplanta. Después de trasplantadas las lechugas se cosechan a los dos meses. El planteo es manual y muy agotador dice, pero reconoce que su hija “La güera” (Miyossi) es la experta en plantar lechugas, puede ganarse hasta mil pesos a las 11 de la mañana con eso, pero eso no lo puede hacer cualquiera.

Es que Yadira y Juan siembran sus propios cultivos, pero también los contratan para hacer plantaciones ajenas, y ahí es donde les ayuda su hija. Un día gané dos mil pesos en una mañana, y compré una lavadora usada, dice Juan. Y me dijo el que nos contrató: oiga no se le hace mucho el pago. Y yo le dije: “y a usted no se le hacen muchas las plantas, porque esto no lo pueden hacer ustedes”.

Así fue como también compraron la motocarro cuando empezaron el negocio, es de las antiguas motos Islo, de las que ya no hay. Un conocido le hizo unas adaptaciones mecánicas para que funcione mejor. Por eso le echa casi media tonelada de verduras frescas y las lleva cada mañana a Villa Juárez.

Ya tienen sus clientes acreditados por eso cada día recorren las calles haciendo entregas, y se dan tiempo para desayunar en la taquería preferida. “la gente me dice que si porqué no consigo otro vehículo mejor, pero en realidad tengo dos camionetas y otra moto. Pero a “la perrona” no la cambio porque es la que me conviene, con 70 pesos de gasolina echo 3 vueltas de San Pedro a Villa Juárez”, afirma Juan, contento de su trabajo.

Mientras la mayoría de las familias en las comunidades rurales batallan todos los años con las malezas en sus solares, Yadira y Juan encontraron la oportunidad de una empresa familiar. Las hortalizas frescas que se sirven en las mesas de Villa Juárez son la obra de sus manos.

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