Reconocer los valores familiares fortalecen lazos
Por: Víctor Pérez
Recuerdo con cariño las enseñanzas de mis padres durante mi infancia.En especial, cuando mi madre nos delegaba ciertas responsabilidades en casa.
De manera astuta, tratábamos de evitar esas responsabilidades acercándonos a ella para besarla y adularla. Pero ella, de manera tajante, nos ubicaba y nos decía:
"Si me quieren mucho, demúestrenmelo haciendo las cosas que les engargué"
Con el tiempo, mi madre nos enseñó dos principios fundamentales de la sana convivencia en una familia: el servicio a los demás y la unidad.
Unidad
Hoy en día, nuestras familias y comunidades parecen necesitar desesperadamente este principio llamado UNIDAD, el cual es fundamental para el desarrollo y la calidad de vida de todos los seres humanos.
La unidad familiar busca satisfacer las necesidades sociales, culturales, emocionales, psicológicas, económicas y físicas de cada uno de sus miembros, sin importar en qué etapa de la vida se encuentren.
La unidad de una familia no se demuestra con palabras, sino con hechos. Como diría mi madre:
"Eres muy unido a mí si estás cuando te necesito".
Generalmente, es en los momentos más difíciles de la vida, como la enfermedad, la soledad, la escasez de dinero e incluso la muerte de un ser querido, cuando se necesita movilizar este valor.
El verdadero amor no se mide con palabras bonitas o buenos deseos, sino con las acciones que se emprenden para reforzar o cuidar la unidad entre los seres queridos dentro de la familia. En otras palabras, la unidad es la medida o el canon del amor.
En conclusión, podemos afirmar que amamos a nuestra familia, pero si no nos esforzamos por hacer las cosas que permiten mejorar la calidad de vida de nuestra propia familia.
Los aspectos sociales, emocionales, académicos y espirituales, nuestras palabras no concuerdan con la realidad que planteamos con nuestros propios hechos. En otras palabras, no somos unidos a nuestros seres queridos.
Que este inicio de año la unidad sea la meta para nuestra familia, porque una familia verdaderamente unida es una familia que vive mejor y, por ende, una familia verdaderamente feliz. Muchas gracias.