En Sinaloa se nace, se vive y se muere con la música de banda, lo que la distingue en todo el país, traspasando fronteras, orgullo cultural del pueblo sinaloense.

(TBN) Su sonido es universal, agradable a cualquier exquisíto oído. El origen de la banda o la tambora sinaloense tiene varias versiones, una de ellas y la más acertada es la de la socióloga y Etnomusicóloga Suiza Helena Simonette.

El estudio se sustenta tras una gran investigación y análisis de registros históricos, llegó a una conclusión en su libro de Doctorado, "Que retumbe la Tambora" que la Tambora Sinaloense, nació en el Siglo XIX con la llegada de los inmigrantes Alemanes al Puerto de Mazatlán.

Estos provenientes del Estado Libre de Baviera, el mayor de los 16 estados de Alemania, donde la música de viento era parte muy importante y significativa de su cultura musical.

Pero no es sino hasta mediados de los años 30´s y hasta la fecha que la tambora sinaloense se queda en el gusto musical de todo Sinaloa, surgiendo a lo largo de todas estas décadas diferentes agrupaciones musicales.

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Una de las bandas pioneras más reconocidas de este género musical es la Banda El Recodo, fundada en 1938 por Cruz Lizárraga, en el Recodo, sindicatura de Mazatlán.

Este personaje ícono de la banda sinaloense, en un principio, se dedicó a tocar corridos, sones, polkas y marchas, pero con el tiempo le dio versatilidad, definiendo un estilo único, empleando la tambora como instrumento principal y generando así piezas más populares.

Actualmente no hay municipio donde no haya un banda de tambora, que amenice de rigor en fiestas regionales, bodas, bautizos, quinceaños, o cualquiera que sea el motivo para celebrar con música de banda.

Aunque muchos dirán que la banda sinaloense es ruidosa, sin duda alegra a cualquiera porque es una explosión de sonidos, pachanguera, estruendosa, melódica, rítmica, con sentimiento, pero sobre todo con vida y energía.

La música de tambora es parte importante del folklore de Sinaloa, es la llave cultural que ha permitido llevar este arte musical a otros estados de México y a diferentes países del mundo.

Contando con una peculiaridad, a diferencia de otras bandas cuyo sonido es monótono y repetitivo, la banda Sinaloense tiene una fluidez y ritmo musical que la hace ser distinta y más cautivante musicalmente.

De amplia versatilidad musical, adaptable desde una cumbia hasta una polka.

La música es nostalgia, sentimiento y alegría pero también es otimismo, el aliento de un pueblo y el instrumento que acerca a los pueblos.

Con este antecedente, ahora sí… ¡que nos siga la tambora!. ¡Jálate la banda!.