¿Cómo referirse a una persona con discapacidad sin ofenderla?
No es un "invidente" sino una "persona ciega". El lenguaje nos incluye a todos.
Referirse a ellos como “discapacitado” es una expresión excluyente.
El lenguaje es una de las formas más sutiles para promover la desigualdad entre las personas, al reflejar el pensamiento y la cultura de una sociedad. Por esta razón, te compartimos las recomendaciones ofrecidas por el CONAPRED para referirse a una persona con discapacidad sin afectar su ser.
En la publicación Recomendaciones para el uso incluyente y no sexista del lenguaje, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) ofrece una herramienta para promover la igualdad y el desarrollo de una cultura basada en el respeto a la diversidad humana y el derecho a la no discriminación.
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De esta manera, una manera práctica de referirse a la amplia diversidad de identidades culturales es anteponer la palabra persona, a fin de no afectar la dignidad humana de quienes son referidos. Y en el caso de las personas con discapacidad, ¿cuál es la expresión correcta?
La denominación establecida por la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad es personas con discapacidad. En caso de conocer la discapacidad a la que se quiere referir, es importante utilizar “persona” seguida de la descripción de la discapacidad, según Conapred.
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Por ejemplo, expresiones como “discapacitado”, “inválido”, “persona con capacidades diferentes o especiales”, son consideradas excluyentes. En cambio, la alternativa incluyente sería: “persona con discapacidad”, “persona con discapacidad física”, entre otras.
De igual modo, es aconsejable evitar llamarlos por “invidente, cieguita”, “sordomuda, sordito”, y sustituirlo por “persona ciega”, “persona sorda”; cambia la referencia de “retrasado mental” por “persona con discapacidad intelectual”.