Esta semana santa probablemente tengas la ilusión de tomarte unas merecidas vacaciones en la playa. Esto quiere decir que pasarás muchas horas expuesto al sol y a los dañinos rayos UV, causantes de las dolorosas quemaduras de sol, el envejecimiento prematuro y en casos más graves (con una exposición prolongada) hasta cáncer de piel. Entonces, ¿cómo puedo proteger mi piel del sol?

Por eso quisimos darte unas recomendaciones para que tu y tus allegados se mantengan protegidos:

Utiliza protector solar

Es cierto que su uso debería ser una práctica diaria (tanto para el rostro como para el cuerpo) pero es sumamente importante cuando estaremos expuestos al sol durante mucho tiempo (y no olvides re aplicarlo cada 2-4 horas).

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Los sombreros y las gorras son tus aliados

Ideales si lo que quieres es darle protección extra a tu carita por si hubo lugares en donde olvidaste aplicar protector solar.

No olvides tus lentes de sol

Aunque no lo creas, nuestros ojos también se ven afectados por la luz solar por eso es importante protegerlos asegurándonos de portar lentes que cuenten con protección UV.

Mantente en la sombra lo más posible

Mismo concepto que con las gorras, la protección física es de mucha ayuda para evitar exponernos.

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Utiliza ropa que te cubra

Si mantenerte en la sombra te es complicado procura utilizar ropa que cubra tu piel para que esta no quede expuesta (eso sí, recomendamos que sea de material ligero para que no sientas tanto calor).

Ahora sí, ya estás listo para disfrutar. ¡Felices vacaciones!

Con información de Clínica Internacional