Al hablar de Mazatlán es inevitable que no venga a la mente el Paseo de Olas Altas, uno de los sitios turísticos más representativos del puerto, que conserva mucha historia de Mazatlán.

Caminar por Olas Altas es garantía de contemplar una majestuosa vista a la bahía, junto a sus atardeceres únicos. Si has visitado Mazatlán, seguramente has pasado por aquí, pero ¿sabes cuál es la historia detrás de su construcción?  

En este municipio son pocas las calles que mantienen sus nombres originales, una es la calle Carnaval y la otra es Olas Altas, así se le tituló debido a las grandes olas que surgen en la bahía, además la zona se conoce como “Paseo” precisamente porque ha sido muy frecuentada por turistas y mazatlecos para dar paseos. 

El primer dato que se tiene de este lugar se remonta a 1830, durante la construcción de un dique para contener las inundaciones las cuales eran tan fuertes que llenaban de arena la Plazuela Machado. 

Fue sobre ese dique que se extendió el paseo, desde el Cerro del Vigía hasta la punta de la bahía, donde hoy se encuentra la Glorieta Sánchez Taboada.

Justo ahí se encuentran la mayoría de monumentos en Mazatlán, como El Venadito (como referencia de la palabra Mazatlán que significa: “tierra de venados”), La Mujer Mazatleca, Ferrusquilla, el escudo de Sinaloa, de Mazatlán y la estatua de Pedro Infante. Además de la Plaza de los Enamorados, la Piedra de los Clavadistas y el monumento al Benemérito de las Américas.

Paseo Olas Altas tiene una extensión de 550 metros y es un magnífico punto de ubicación para observar la Isla del Cardón, la Isla de Lobos Marinos,el famoso Faro, los buques y embarcaciones, y desde luego, las asombrosas puestas de sol en el mar. Además por su alto oleaje es un área muy visitada por surfistas.

En el archivo histórico de Mazatlán se señala que el poeta Amado Nervo, vivió en una casa de madera de Olas Altas, en 1901.

Un ícono de Olas Altas es el Hotel Belmar, también conocido como el hotel de las estrellas tuvo su época de popularidad entre los años 30´s y 70's. Fue construido en 1922 por el inglés Louis Bradbury, que era un millonario empresario minero que explotaba las Minas del Tajo en El Rosario, Sinaloa.

Otro hotel relevante por su historia es el Hotel Freeman, construido en 1949 por Guillermo Freeman, arquitecto alemán. Dicho hotel fue por muchos años el edificio más alto del norte de México, con 14 pisos.

Como  dato histórico, en el extremo norte del paseo se encuentra también el Cerro de La Nevería, el cual, fue un punto estratégico en la defensa de la ciudad cuando el ejército francés intentó desembarcar en el puerto, en marzo de 1864.

En agosto de 1914, el malecón de Olas Altas fue el escenario de la toma de Maztalán por las tropas revolucionarias, aquí sucedió el último enfrentamiento armado en esta ciudad, de los que tuvieron verificativo durante la Revolución Mexicana.

Por todo esto, Olas Altas ha sido un gran testigo de la historia y cultura de Mazatlán, de sus festividades, especialmente del icónico Carnaval que se realiza año tras año.

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