¿Es lo mismo una empresa familiar que una familia empresaria? Es la incógnita inicial que la doctora María Fonseca Paredes plantea a aquellas familias que están en su búsqueda de la trascendencia empresarial.

La doctora María Fonseca es directora del Instituto de Familias Empresariales (IFEM), un organismo creado por el Tec de Monterrey para el desarrollo y gestión de las familias empresarias y sus líderes.

Dentro de sus funciones, busca que las empresas puedan crecer en conjunto, por lo que se propuso brindar 9 consejos básicos que considera debe seguir toda empresa familiar para lograr trascender en el tiempo.

Fonseca visitó el campus Sinaloa para compartir su conferencia "Empresas familiares: Oportunidades para la continuidad y trascendencia", y brindar consejos sobre cómo generar un legado.

Levantar la empresa es fácil, pero piensa en cómo vas a jalar a esas manos, a esas mentes, a esos corazones que te van a ayudar a hacerlo realidad.

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1. Priorizar la institucionalización

El primer paso es comenzar a preguntarse: ¿qué es lo que tengo que hacer para que esto se mantenga cuando yo no esté?

“Se debe tener una visión a largo plazo y un enorme deseo de transmitir algo. Hay que construir estructuras y establecerlas, es decir la institucionalización”, expresó la doctora.

2. Fomentar la colaboración

No todos tienen que estar en la empresa familiar. Los que están operando juegan un rol, pero los que no están operando también pueden contribuir a que la empresa vaya mucho más lejos.

“Busquen desarrollar sus propios talentos. Son un grupo empresarial, son una organización, la más antigua del mundo: la familia”, destacó.

3. Empoderar a las mujeres

Después de hacer énfasis en que, en México, apenas el 10% de los consejeros de administración son mujeres, Fonseca mencionó la importancia de impulsar la participación de mujeres.

“Las mujeres deben empoderar a sus hijas para que se la crean, para que reconozcan que pueden ser lo que quieran ser”, mencionó.

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4. Buscar un constante aprendizaje

“Estamos tan ocupados en hacer que aquello funcione (la empresa) que no hemos dedicado tiempo a escuchar, a leer, a saber qué es lo que han hecho las familias que entienden el concepto de continuidad”.

Además, hizo énfasis en el valor de la capacitación y la curiosidad auténtica en el aprendizaje para el progreso. 

5. Tratar los conflictos familiares

De igual manera, Fonseca destacó que usualmente se cree que hay que evitar los conflictos y separar la familia de la empresa. 

Sin embargo, considera que es una afirmación errónea, pues reconoce que los conflictos siempre van a existir por lo que hay que aprender a manejarlos para disminuir sus efectos.

“El respeto por el otro merece crear espacios propicios para sostener conversaciones difíciles. No asumas saber lo que él otro está pensando”, sugiere.

6. Reconocer la diversidad generacional

Empoderar y reconocer a cada generación es esencial según la doctora, partiendo de entender que son grupos que vivieron ciertos acontecimientos que los hacen construir distintas ideologías. 

“No son mejores ni peores, son diferentes. Traten a cada generación como si fuera la primera, para cambiar el discurso y la perspectiva de la empresa”, destacó. 

7. Enamorar a las generaciones sucesoras

Es necesario identificar cuál es el propósito de la empresa, uno que vaya más allá de la rentabilidad, pues las nuevas generaciones buscan esos tipos de propósitos.

“Tienen que empezar a enamorar con el ejemplo de lo que hace ese instituto si quieren que sean sus hijos los que continúen, fomentando altos niveles de involucramiento”.

8. Definir el futuro de tu legado

“Ten claro cuál es ese legado que quieres que trascienda ¿realmente necesitas a tus hijos? ¿o solamente a alguien más que custodie lo que construiste?”, cuestionó la doctora.

Comúnmente, los padres esperan que sus hijos sean quienes hereden la empresa familiar, por lo que la doctora recomienda no imponerse y establecer un canal de comunicación con los jóvenes.

“Para preservar el legado no es necesario estar operando. Si a ninguno de tus hijos le llama la atención la empresa, no pasa nada. Escúchalos y no olvides que se trata de una decisión familiar”, explicó.

9. Identificar a los posibles aliados

Como último consejo, la doctora indica que al tener una mente abierta y comprender que los sucesores también pueden ser sobrinos, hermanos e incluso personas externas a la familia, la posibilidad de trascender aumenta.

“Levantar la empresa es fácil, pero piensa en cómo vas a jalar a esas manos, a esas mentes, a esos corazones que te van a ayudar a hacerlo realidad”, resaltó.

Empresa familiar vs familia empresaria

De la misma manera, destacó que es indispensable entender la diferencia entre una empresa familiar y una familiar empresaria, por lo que realizó un ejemplo con Chata, una empresa procesadora de alimentos sinaloense.

“La empresa familiar es productos Chata, mientras la familia empresaria es la familia Machado.

Productos Chata pudiera cerrar, pero no es relevante, porque la familia Machado puede hacer otras cosas y el legado continúa.”, agregó.

De acuerdo a María, el INEGI reporta que el 90% de las empresas mexicanas son de carácter familiar, por lo que considera importante tener en cuenta estos consejos para lograr construir un legado familiar.

Para finalizar, la directora cerró la plática haciendo hincapié en el concepto que considera más importante para la trascendencia.

“El legado de cada persona es un concepto diferente, no necesariamente tiene que ser la empresa. El legado también puede ser un buen consejo, valores e incluso una buena educación”, finalizó.

Artículo original de Revista Conecta Tecnológico de Monterrey.