Lo que debes saber sobre la industria zapatera en León, Guanajuato
La industria del calzado en León, Guanajuato, tiene una rica y fascinante historia que se remonta a la época colonial que le da identidad en todo México
A mediados del siglo XVII, León comenzó a consolidarse como un centro de producción de calzado. Los avances tecnológicos de la revolución industrial como la energía eléctrica y el paso del ferrocarril transformaron esta industria dándole identidad y orgullo nacional.
En 1645, con herramientas rudimentarias de madera, 36 familias de origen español, mulato e indígena fabricaban zapatos en León Guanajuato, que serían lucidos con orgullo por las figuras más destacadas del virreinato. Estos talleres, aunque productivos, eran lugares donde "se trabajaba mucho y se ganaba poco".
Primero fue la instalación en León Guanajuato la primera planta eléctrica de la República Mexicana en 1879, lo que vino a beneficiar principalmente a la actividad textil. Luego el verdadero cambio se originó con la llegada del ferrocarril.
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Este medio de transporte no sólo facilitó la llegada de maquinaria moderna, aligerando la carga de trabajo, sino que también abrió las puertas a la exportación.
Texas se convirtió en el primer estado de Estados Unidos en comprar masivamente los zapatos de León, marcando el inicio de una nueva era.
Paralelamente, la industria del curtido de pieles comenzó a desarrollarse rápidamente. La curtiduría se convirtió en una fuente significativa de empleo para los habitantes de León y atrajo a forasteros en busca de oportunidades.
La producción de pieles de alta calidad impulsó aún más la industria del calzado, transformando casi cada hogar en un taller familiar.
¿Cómo surge la primera industria del calzado en León?
La revista México Desconocido cita que, en 1872, don Eugenio Zamarripa fundó "La Nueva Industria", la primera fábrica de zapatos que sentó las bases para una producción formal y estructurada.
Esta empresa forjó los lineamientos que seguirían muchas otras, estableciendo un nuevo estándar en la producción de calzado. Para el año 1900, el 17% de la población económicamente activa de León trabajaba en la industria del cuero, en diversas formas.
La historia del calzado en León es un testimonio de cómo la visión, la innovación y el trabajo arduo pueden transformar una industria y llevarla al reconocimiento mundial.
Hoy en día, los zapatos de León son reconocidos no solo en México, sino en todo el mundo. La calidad, comodidad y buen gusto del calzado leonés han llevado a la ciudad a ser un referente en la industria global del calzado.
León ha pasado de ser una ciudad con talleres rudimentarios a un emporio de zapatos, destacándose por su innovación y dedicación a la excelencia.
Con información de: México Desconocido