Navolato, Sinaloa.- Altata, ese paraíso sinaloense que emerge de las profundidades del Mar de Cortés, como un diamante entre las aguas, rodeado de dunas doradas, manglares danzantes y lagunas misteriosas. Es un lugar de ensueño, de paz y belleza que te cautiva desde el primer instante.

Esta bahía de pescadores, de ambiente sereno y aire tropical, invita a sumergirse en la calidez de sus aguas y deleitarse con el sol que acaricia la piel. Un destino perfecto para quienes buscan disfrutar del mar y el sol, y gozar de momentos inolvidables en compañía de la familia.

Durante una visita de Tus Buenas Noticias descubrimos que el malecón de Altata, está lleno de vida, y se convierte en el centro de la diversión. Aquí, bajo el resplandor del ocaso, la música y la alegría se entrelazan mientras los lugareños ofrecen delicias marinas que deleitan el paladar.

Las maravillas naturales de Altata son incontables. Un paseo en lancha por las lagunas y manglares es una experiencia única que revela el esplendor de la fauna que habita estos ecosistemas protegidos. Los atardeceres, son una sinfonía de colores, pintan el cielo y el corazón con tonalidades distintas.

Los aventureros encontrarán en las dunas de arena de El Tambor un reto a la adrenalina. Montar en vehículos 4x4, deslizarse sobre una tabla de surf en el desierto, sentir el rugir del viento en los oídos, ¡es vivir la emoción al máximo!

En las playas poco visitadas durante la semana, se respira paz y tranquilidad. Allí, los entusiastas  se funden con el mar de forma armoniosa.

Altata, ese tesoro  en Sinaloa, donde cada rincón esconde secretos y aventuras. Un lugar donde la naturaleza se muestra en su máxima expresión, abriendo sus brazos para recibir a quienes desean perdurar en la memoria de sus paisajes majestuosos.

Sumérgete en la magia de Altata, y déjate llevar por la belleza que solo la naturaleza puede regalarte. ¡Un destino sin igual te espera!