México es un país rico y lleno de biodiversidad, ya que presume de una gran abundancia de especies, tanto marinas como terrestres. Por lo que se encuentra en la quinta posición, de 12, del ranking mundial de naciones megadiversas del mundo del World Wildlife Fund. 

Los anfibios son animales que pasan su vida entre el agua y la tierra, otra de sus características es que tienen una piel desnuda que contiene glándulas cuyas secreciones les ayudan a mantener la piel húmeda cuándo están en la tierra. Algunos secretan sustancias que son útiles en el apareamiento o tóxicas para protegerse de los depredadores, de acuerdo con Biodiversidad Mexicana. 

Otro dato curioso de los anfibios, es que son capaces de proveer oxígeno a sus pulmones aun estando dentro del agua. 

Se estima que en el mundo hay 6,333 especies de anfibios y en México se estima que hay 376 especies, es por esto que México se considera como el quinto país con mayor diversidad de anfibios en todo el mundo. El 70% de los anfibios en México se encuentran en las islas del Golfo de California, la Sierra Madre del Sur de Guerrero y Oaxaca y el Eje Volcánico Transversal. 

 Los anfibios se dividen en 3 grupos:

• Sapos y ranas: Los sapos, ranas de cristal, ranas de hojarasca, ranas de dedos largos, ranas espumeras, sapos termiteros, ranas de garras, ranas manchadas, sapo borracho y sapos excavadores son las especies de sapos y ranas que habitan en México: 
• Salamandras: Los ajolotes, tlaconetes, tritones y sirenas son las especies de salamandras que habitan en México. 
• Cecilias: Solamente hay dos especies de cecilias habitando en México.

Entre un tercio y la mitad de los anfibios se encuentran en peligro de extinción, lamentablemente, 120 especies de anfibios ya han desaparecido del planeta. Los anfibios tienen papeles muy importantes dentro del ecosistema, transfieren nutrientes entre la tierra y el agua y se encargan de controlar las plagas de insectos. Los anfibios son los primeros animales en ser afectados por el deterioro ambiental y por los efectos de la contaminación. 

El ajolote es uno de los anfibios más emblemáticos de México y, sin embargo, está clasificado en peligro crítico por la reducción de su hábitat y contaminación en los lagos de Xochimilco, que es dónde habita, de acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) . 

Actualmente, hay sitios de preservación para los anfibios en México y áreas protegidas para estos animales con el objetivo de preservar la especie y salvarlos de la extinción.

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