¿En qué consiste la técnica japonesa Kintsugi?
El kintsugi, una técnica japonesa de reparación de cerámica con oro, no solo restaura objetos, sino que los embellece al resaltar sus fracturas.
Actualmente, nos encontramos en una sociedad consumista y que percibe lo comprado como obsoleto en muy poco tiempo. Hoy en día, es de lo más común, que si se te quebró una taza, jarrón o figura, te resignes a recoger sus pedazos y te deshagas de ello.
En Japón, esto resulta extraño o impensable. Han convertido una técnica milenaria como el Kintsugi en una filosofía de vida, siendo aplicada en distintos aspectos de la vida, desde reparaciones y apreciación de objetos, hasta la aceptación y reconocimiento de nuestras heridas, buscando con ello una vida más plena.
Pero ¿qué es el Kintsugi? Esta es una hermosa técnica japonesa que consiste básicamente en reparar objetos rotos mediante oro o plata líquida.
¡Recibe las últimas noticias!
El oro es usado para soldar las grietas o fragmentos, volviendo a esta pieza mucho más valiosa, no solo por la utilización de este metal precioso sino por lo singular y único que termina siendo. Se dice que estas piezas se vuelven únicas ya que cada pieza contiene patrones de rupturas irrepetibles.
La palabra Kintsugi como muchos de los conceptos japoneses está compuesta de dos o más términos, en esta caso son: “kin”, que significa oro, y de “tsugi” que significa unión. Teniendo como resultado que la filosofía Kintsugi literalmente significa “unión con oro”.
Pero como lo mencionaba anteriormente, el significado de Kintsugi no consiste solamente en pegar pedazos de algo roto mediante oro, va mucho más allá y los japoneses lo han sabido interpretar ayudándoles a encontrar plenitud en su vida.
Esta es una filosofía que celebra y enaltece la imperfección, dando como resultado la apreciación de la belleza que trae consigo las cicatrices.
Formas de llevar el Kintsugi a tu rutina
Más allá de la técnica para reparar objetos y volverlos más preciados, a continuación, te mencionare algunas formas en las que puedes llevar esta filosofía a tu vida diaria.
- Valora tu historia: Cada persona está llena de historias y experiencias vividas, estas pueden ser buenas o malas, pero al final todas ellas contribuyen en nuestra formación personal. Aprende de lo vivido y dale el significado debido en tu vida.
- Belleza en las cicatrices: Nuestras experiencias negativas, nos brindan sentido de resiliencia y sabiduría. Por ello, es importante encontrarle lo positivo a todos estos desafíos que se te presentan.
- Celebrar nuestras reparaciones: Cada desafío o herida superada en nuestra vida, es motivo de celebración. El tener capacidad de resistencia y superación es algo para sentirnos orgullosos.
- Aceptar nuestros errores: Como todo ser humano, en nuestra vida cometeremos errores. Esta filosofía te invita a dejar de ser tan duros con nosotros mismos, aceptar nuestras fallas y verlas como oportunidades de crecimiento.
Saber valorar lo que se rompe en nosotros nos aporta una serenidad objetiva. Apreciemos como somos: rotos y nuevos, únicos, irreemplazables, en permanente cambio.
En la técnica Kintsugi, es más importante el tiempo de espera para soldar que incluso la mezcla que utilizan. En tu vida funciona de la misma manera, el tiempo será el que cicatrice tus heridas.