La caída de los precios de la energía solar: ¿Hasta dónde llegará?
La energía solar está viviendo una revolución gracias a la drástica disminución de sus costos.
Durante los últimos años, el precio de producir electricidad con energía solar ha caído significativamente, y todo apunta a que esta tendencia continuará. Pero, ¿qué tan rápido están disminuyendo los costos y cuánto más pueden reducirse?
La velocidad de la reducción
Desde 2010 hasta 2023, el costo promedio de la electricidad generada por energía solar cayó un impresionante 95%. Gran parte de esta reducción se debe a la disminución en el precio de los paneles fotovoltaicos (PV), que actualmente cuestan aproximadamente $0.10 por vatio en muchos países.
Si la tendencia de reducción anual del 12% continúa, se estima que en los próximos 10 años el costo de los paneles podría caer a tan solo $0.02 por vatio.
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¿Qué impulsa esta disminución?
El principal motor detrás de esta tendencia es la mejora constante en la tecnología. Por ejemplo, los paneles actuales convierten cerca del 20% de la energía solar en electricidad. Sin embargo, nuevos materiales como el perovskita prometen aumentar esta eficiencia hasta un 34%.
Este avance no solo mejorará el rendimiento, sino que también reducirá el costo por unidad de energía producida.
Otro factor importante es la reducción de los costos de "Balance de Sistema" (BoS), que incluyen infraestructura, cables y construcción. Aunque históricamente representaban la mitad del costo total, también han disminuido significativamente, gracias a innovaciones en el diseño y la construcción.
¿Cuánto más pueden bajar los costos?
Además de los avances tecnológicos, la economía de escala juega un papel crucial. A medida que la demanda de paneles solares aumenta, los fabricantes pueden producir más a menor costo. En 2024, se espera que las instalaciones globales crezcan un 33% en comparación con 2023, lo que asegura que los precios seguirán disminuyendo.
A largo plazo, es posible que veamos paneles solares que cuesten menos que materiales de construcción tradicionales, como cercas o techos. Esto abre la puerta a un uso aún más amplio, no solo en proyectos energéticos, sino también en la arquitectura y el diseño urbano.
Un futuro prometedor
La caída de los costos de la energía solar no solo beneficia al medio ambiente, sino también a la economía global. Al volverse más accesible, la energía solar puede transformar comunidades al proporcionar electricidad limpia y barata, especialmente en áreas remotas donde las redes eléctricas tradicionales son inexistentes.
Además, esta tendencia refuerza el papel de la energía solar como una solución clave para combatir el cambio climático. Al ser más asequible, los gobiernos, las empresas y los individuos tienen menos barreras para adoptarla.
