Durante siglos, se han usado los ríos para una serie de beneficios que incluyen el agua para las ciudades, la generación de energía hidroeléctrica y el riego, suministrados a través de proyectos de infraestructura gigantescos que han impulsado el crecimiento, oportunidades y el bienestar económico en las comunidades, según la WWF (World Wildlife Fund).

Datos de la página de biodiversidad Mexicana nos dice que los servicios ambientales que prestan los ríos, arroyos, lagos y lagunas y humedales son: a) servicios de provisión de alimentos, agua dulce, fibras, maderas, combustibles y recursos genéticos; b) servicios de regulación como regulación atmosférica y del clima, regulación hidrológica, control de la contaminación y de la erosión, y control de inundaciones; c) servicios culturales: bienestar, recreación, valor estético y de educación e investigación científica y; d) servicios de soporte de la biodiversidad, formación de suelos, reciclaje de nutrientes y fertilidad y polinización.

No cabe duda de que los ríos aportan varios beneficios a los humanos y a muchos seres vivos, lamentablemente en la actualidad los ríos son utilizados para descargas de aguas residuales y otras prácticas que contaminan el agua. En las últimas décadas, hemos drenado, represado y contaminado ríos en todo el mundo para asegurar el agua que necesitamos para construir nuestras civilizaciones, sin realmente considerar las consecuencias.

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Y los riesgos no podrían ser más altos: al menos 2 mil millones de personas dependen directamente de los ríos para consumo de agua potable; 19 por ciento del PIB mundial proviene de cuencas con un alto riesgo de agua; y los ríos sustentan aproximadamente una cuarta parte de la producción mundial de alimentos a través del riego, sin mencionar la riqueza de la biodiversidad que depende de ríos saludables.

Es por eso que dar un manejo adecuado y atender las problemáticas por la que están cruzando los ríos del planeta es tan importante para los seres humanos y para la biodiversidad.

Un ejemplo muy cercano se encuentra en Culiacán, que se caracteriza por ser una ciudad entre ríos, algo que la vuelve muy atractiva para los visitantes y para los que viven en ella, existen dos ríos el Tamazula y el Humaya, que la unión de ellos, en cierto punto de la ciudad forman el rio Culiacán, el cual continua hasta desembocar en la bahía donde se encuentra Altata y Ensenada de Pabellones.

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También estos ríos de Culiacán han sufrido diversos cambios y reciben descargas desde hace mucho tiempo, por eso en cuestión de calidad del agua, la CONAGUA ha realizado estudios en varios puntos de monitoreo en los ríos, drenes y presas, analizando los siguientes indicadores: demanda bioquímica de oxígeno, demanda química de oxígeno, solidos suspendidos totales y coliformes fecales. 

Si bien la demanda química y bioquímica de oxígeno del agua es buena, los estudios de sólidos suspendidos totales en general son aceptables en la mayor parte de los puntos de monitoreo sobre los ríos y presas, pero en el dren principal llega al nivel de contaminada y en el indicador de coliformes fecales los estudios señalan que la mayoría de los puntos de monitoreo en ríos, presas y drenes aparecen con un nivel de contaminada, y fuertemente contaminada, haciendo que algunas zonas estén limitadas para cierto tipo de consumo, aunque otras zonas son aceptables, con buena y excelente calidad y se pueden aprovechar.

Esto es tomándose de referencia la categoría de excelente calidad, buena calidad, aceptable, contaminada y fuertemente contaminada de los datos del SINA (Sistema Nacional de Información del Agua).

Aquí te compartimos el link de la página de calidad de agua Nacional y Regional del SINA para que puedas visitarla y revisar el mapa:

http://sina.conagua.gob.mx/sina/tema.php?tema=calidadAgua

Gracias a estos estudios se puede conocer la calidad del agua en nuestros ríos y podemos ver en dónde y cómo podemos actuar creando programas para el mejoramiento del agua, podemos hacer conciencia en la población, instituciones, sector agrícola, sector ganadero y empresas. Buscando nuevas alternativas de limpieza del agua y poder tener una calidad buena y excelente para la vida acuática, flora, fauna terrestre y los seres humanos.

Te invitamos a cuidar el agua no solo de los ríos si no toda aquella agua dulce y salada en donde tengas posibilidades, tratemos de no contaminarla, no tirar basura en los ríos, no derramar químicos en ella, no tires baterías o pilas al agua, busquemos diálogo con todo tipo de empresas e instituciones que puedan apoyar a mejorar la calidad del agua, pero empecemos por uno mismo.