¡Con los niños no! Estudiantes y docentes de la primaria Ignacio Manuel Altamirano se unen al clamor por la Paz en Sinaloa
Con un mensaje claro y unísono la comunidad escolar del plantel que se ubica en la colonia Salvador Alvarado en Culiacán, exige un entorno seguro para los niños y justicia por la muerte de Gael y Alexander
En medio de un clima de violencia creciente que ha marcado el corazón de Culiacán, la comunidad escolar de la primaria Ignacio Manuel Altamirano, ubicado en la colonia Salvador Alvarado, se ha unido al lamento colectivo y ha exigido, con un solo grito, Paz y justicia.
Se unen al clamor de Paz en la primaria Manuel Altamirano
La tragedia que costó la vida a los hermanos Alexander y Gael, de 9 y 12 años, junto a su padre Antonio, en un ataque armado el pasado fin de semana, ha conmovido no solo a sus familiares y amigos, sino también a toda la sociedad culiacanense, que no puede seguir callada ante la violencia que arrebata vidas inocentes.
Aunque no pudieron unirse a la marcha que, el día de hoy, en honor a los pequeños, estudiantes y personal docente de la escuela se hicieron presentes en el plantel, convocados por una causa común: exigir que los niños no sean más víctimas de la violencia.
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Vistiendo prendas blancas, símbolo de la esperanza y la paz, formaron un mensaje claro en su techumbre: ¡Con los niños no, queremos Paz!
La actividad, cargada de emoción y significado, tuvo el objetivo de que cada niño, niña, maestro y maestra reflexionara sobre lo que está sucediendo en su ciudad y sobre el papel que todos deben jugar en la construcción de un entorno más seguro.
En lugar de conformarse con la indiferencia, los niños de la escuela Ignacio Manuel Altamirano se alzaron como embajadores de la Paz, recordando que el futuro de cualquier sociedad depende de la protección y educación de su infancia.
La directora del plantel, Cuquis Gurrola Vázquez, reflexionó sobre la importancia de garantizar una educación libre de violencia, un derecho fundamental que se ve vulnerado cuando los niños son víctimas de situaciones que no deberían vivir jamás.
"Cada niño y niña tiene el derecho inalienable a una educación de calidad, libre de violencia. La infancia es el periodo en el que se siembran los sueños, las esperanzas y las oportunidades para un futuro mejor", expresó Gurrola Vázquez.
Comunidad escolar de Culiacán exige Paz y protección infantil
En una sociedad que muchas veces parece paralizada por la violencia, el mensaje de la comunidad escolar de la primaria Ignacio Manuel Altamirano resuena con fuerza: la paz no es negociable, y los niños deben ser los primeros en ser protegidos.
Esta acción, simbólica y profundamente humana, no solo invita a considerar sobre la seguridad y el bienestar de los niños, sino también a revalorizar la importancia de la educación como el cimiento de un futuro más prometedor.
En un contexto donde la violencia parece no dar tregua, la voz de la comunidad escolar de la primaria Ignacio Manuel Altamirano se levanta como un faro de esperanza. Al unirse en un llamado claro y rotundo por la paz, estos niños y docentes nos recuerdan que la violencia no tiene cabida en un mundo donde los sueños de la infancia deberían florecer.
Al vestir de blanco, al formar un cordón y un corazón símbolo de paz, y al gritar al unísono "¡Con los niños no, queremos Paz!", la comunidad educativa se convierte en un reflejo de la sociedad que aún cree en un futuro mejor.
Es urgente que nos detengamos a reflexionar sobre lo que estamos construyendo para las generaciones que vienen. La violencia no solo destruye cuerpos, sino también ilusiones y futuros. Al proteger a nuestros niños, estamos protegiendo el mañana. La Paz no es solo un deseo, es un compromiso que todos debemos abrazar y hacer realidad.
Hoy, como nunca, debemos levantar la voz, cada uno desde su trinchera, para garantizar que nuestros niños vivan en un mundo seguro, lleno de oportunidades y, sobre todo, sin miedo. Porque, como nos enseñan los pequeños de Culiacán, la paz comienza con ellos, con su derecho a soñar, a vivir y a crecer. ¡Que su voz sea la nuestra! ¡Con los niños no, queremos Paz!
