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Descubre la cultura ancestral de Teuchitlán en Jalisco

Exploración de la cultura de Teuchitlán en México

11 marzo, 2025
Jacqueline Sánchez Osuna
Colaboración especial de Ana Isabel Orona Alonso
La zona arqueológica de Guachimontones es uno de los secretos de Jalisco. Foto: Cortesía.
La zona arqueológica de Guachimontones es uno de los secretos de Jalisco. Foto: Cortesía.

En el Occidente de México, en el municipio de Teuchitlán, Jalisco, se encuentra Guachimontones, la más grande zona arqueológica de la tradición de Teuchitlán.

La tradición de Teuchitlán

El nombre de este histórico sitio fue otorgado por los indígenas de origen náhuatl, quienes lo nombraron “Teotzitlán”. El nombre fue recibiendo varias modificaciones hasta llegar a la época del presidente Lázaro Cárdenas, cuando pasó a llamarse “Teuchitlán”.

La cultura de tradición de Teuchitlán alcanzó su apogeo aproximadamente en el año 200 d.C y tuvo presencia en estados como Colima, Nayarit, Guanajuato, Querétaro, Sinaloa y Zacatecas, pero la más grande zona arqueológica encontrada hasta la fecha, Guachimontones, se encuentra en el municipio de Teuchitlán en Jalisco.

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Conoce la zona arqueológica de Teuchitlan.
Conoce la zona arqueológica de Teuchitlan. Foto: Cortesía.

¿Cómo entrar a la zona arqueológica Guachimontones?

La zona arqueológica de Guachimontones se encuentra a 1 kilómetro al noreste del pueblo de Teuchitlán, y el ingreso se realiza por el Centro Interpretativo Guachimontones “Phil Weigand”, nombrado en honor al arqueólogo de Nebraska que decidió restaurar la zona arqueológica.

La entrada general cuesta $30, pero existe un descuento del 50% a maestros y estudiantes. La entrada es libre para menores de 12 años y adultos que cuenten con la credencial INAPAM.

¿Qué ver en Guachimontones?

En el ingreso al Centro Interpretativo Guachimontones “Phil Weigand” podemos encontrar un mural hecho por Jorge Monroy que nos representa a la cultura de la tradición de Teuchitlán. Además, se nos presenta la historia de esta cultura y una colección de piezas pertenecientes a ella.

Existe una colección de piezas prehispánicas que representan la historia de esta cultura.
Existe una colección de piezas prehispánicas que representan la historia de esta cultura. Foto: Cortesía

En la zona arqueológica como tal nos encontramos con estructuras que se asemejan a pirámides circulares rodeadas de varias plataformas de roca.

Estas mal llamadas “pirámides” son realmente altares y se utilizaban para la realización de diversos rituales. Un poste era colocado en el centro de los altares, mientras que un sacerdote se apoyaba en él sobre el estómago mientras realizaba el ritual.

Las mal llamadas pirámides circulares son altares en los que realizaban sus rituales.
Las mal llamadas pirámides circulares son altares en los que realizaban sus rituales. Foto: Cortesía.

Podemos ver la importancia de sus rituales en la dimensión de muchas de las estructuras como La Iguana, pero la más monumental de todas es el Gran Guachi.

Esta estructura es la más grande de tradición de Teuchitlán encontrada hasta la fecha. Lamentablemente se encuentra bastante deteriorada por el tiempo y por los saqueos, y debido a las leyes de México no es posible ser restaurada.

La estructura más importante de todas es la de el Gran Guachi.
La estructura más importante de todas es la de el Gran Guachi. Foto: Cortesía

Además de los altares, también podemos encontrar dos juegos de pelota. Este era uno de los elementos más importantes para esta cultura, pues era utilizado para resolver disputas y desacuerdos entre los habitantes.

El legado de Guachimontones no es tan conocido en México como lo serían otras zonas arqueológicas como Chichén Itzá, pero aún así, logra transmitirnos historias del pasado y mostrarnos un atisbo de la vida de los que estuvieron antes de nosotros.


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