Todos seremos jefes, qué clase de jefe te gustaría ser

¿Qué tan buen jefe te gustaría ser?. Si quieres tener las claves para ser un buen jefe, este texto es perfecto para ti.

Todos los trabajadores en activo hemos tenido un jefe. Y todos seremos jefes en algún momento. ¿Qué clase de jefe te gustaría ser?. Decía Richard Brandson, Fundador de Virgin Atlantic: "Cuida de tus empleados que ellos cuidarán a tus clientes".

Esta reflexión cobra especial relevancia cuando estudios diversos en el mundo corporativo aseguran que el comportamiento de los jefes es clave para la satisfacción laboral en cualquier empresa, sin importar el tamaño. De ahí la necesidad de definir oportunamente la clase de jefe que vas a ser, o la clase de jefe que el corporativo necesita.

El comportamiento de sus jefes y supervisores. De toda la miseria del mundo, una fuente radica al interior de la esfera de influencia de las organizaciones, porque los problemas personales o sociales, en alguna manera están representados en el personal y jefes. Tómalo en cuenta, tu labor es buscar soluciones, no ampliar los problemas.

Llevándose bien: La relación con los jefes y supervisores son el factor número 1 de la satisfacción laboral. Lo que resulta en la segunda razón más importante en el bienestar laboral de los colaboradores dentro de las organizaciones.

Estudios demuestran que en EUA el 56% de los trabajadores consideran que sus jefes son moderadamente o altamente tóxicos en sus relaciones laborales. El 75% ratifican que sus jefes o supervisores son la principal fuente de estrés laboral en el día a día. Mejor sería ser la inspiración que la depresión.

El poder envenena. Conforme asciende una persona dentro de las organizaciones aumenta el riesgo a volverse insensible y cruel con los colaboradores. Robert Sutton, profesor de comportamiento organizacional por la escuela de Negocios de Stanford, cita lo siguiente: “Muchas investigaciones muestran que el sentimiento de poder provoca un enfoque mayor en las necesidades y querencias personales y ser inadvertido respecto a las necesidades y sentimientos de otros, lo cual representa un problema”.

Tú eres el jefe: Si tú eres el jefe o el supervisor, aquí hay cuatro aspectos que puedes hacer para alegrar y mejorar el ambiente laboral, esto es sin importar el tipo de cultura organizacional que se tenga.

1. Se amable: las investigaciones muestran que cuando los empleados perciben compasión o amabilidad de parte de sus líderes se muestran más leales a él. La lealtad permite un mejor desempeño laboral.
2. Sé agradecido: Agradecer rutinariamente a los miembros del equipo, frecuentemente, con generosidad y genuinamente no cuesta nada y crea una dinámica positiva donde todos trabajan mejor.
3. Se positivo: validar los sentimientos sin tomar partido o juzgar, ofrecer apoyo es un impulso a la motivación y fomenta el desarrollo del sentimiento de autonomía y autocompetencia, lo que se traduce directamente en estar más contento y el bienestar.
4. Estar bien: los jefes que priorizan su bienestar y atienden sus necesidades, incluido el practicar ejercicio, comer bien, descansar y dormir bien, puede ayudar a los demás a priorizar también en sus vidas.

Guarda esta información en tu memorial visible y obsérvalo cada día, tu autoevaluación te hará generar una nueva personalidad en la mejor clase de jefe. Éxito en todo lo que emprendas.

Con información de: Five Fifty: Better Bossess de mckinsey.com.

Más información relacionada

¿Mi propio jefe? 5 tips para jóvenes emprendedores

¿Qué tan amigo de tu jefe debes ser?

Las 10 señales de un buen líder