María Mercedes, una estrella en ascenso en el dinámico mundo del atletismo en Culiacán

Culiacán, Sinaloa.- En el vibrante mundo del atletismo, emerge una figura que brilla con luz propia. Con un espíritu indomable y una dedicación inquebrantable, María Mercedes Félix Beltrán, está dejando una huella imborrable en cada competencia que enfrenta.

A pesar de su corta edad, la talentosa deportista ha demostrado un talento excepcional y una determinación feroz en la pista. Desde sus primeros pasos en el deporte, ha cautivado a todos con su velocidad relámpago y su agilidad impresionante.

“Mi maestro de Educación Física, de la primaria Revolución Mexicana, Ranfiel Guzmán Ríos, me vio que tenía habilidades en atletismo y me motivó a que se siguiera preparándome”, manifestó la menor de 12 años.

Competitividad muy sana

La carismática niña asegura que, a diferencia de otros deportes, como el fútbol, el atletismo es una disciplina que no tiene grandes presiones y que, generalmente, promueve una competitividad muy sana. “Me agrada practicar atletismo, porque me fascina correr al aire libre”.

Asimismo, la promesa de atletismo revela para Tus Buenas Noticias qué, en cada carrera, desafía los límites de lo que se considera posible. Su enfoque inquebrantable y su ética de trabajo incansable la han llevado a alcanzar logros notables en el dinámico mundo del atletismo.

Ha participado en competencias a nivel Zona Escolar, a nivel municipal, lo que le ha permitido estar en los primeros lugares. Actualmente, se prepara con mucho entusiasmo, porque próximamente representará a Culiacán, en una justa donde participarán competidor@s de todo el estado.

Con una mentalidad enfocada en el éxito, María Mercedes nos comparte su secreto: "Siempre me concentro y evito preocuparme por lo que hacen los demás. Siempre debemos creer en nosotros mismos, porque nada es imposible", afirmó.

Promesa del atletismo

Además de sus logros en la pista, esta niña promesa del atletismo se distingue por su brillante aprovechamiento académico y su participación en la escolta de su plantel educativo.

Confiesa que de grande desea ser una reconocida arquitecta, y anhela seguir practicando la diciplina que le ha brindado muchos triunfos, porque desea competir a nivel nacional e internacional, como lo hizo, a la deportista que admira, la exatleta mexicana, Ana Gabriela Guevara, medallista olímpica de plata en Atenas 2004.

María Mercedes invita a los niños y niñas a que practiquen algún deporte sin dejar a un lado sus estudios y que siempre luchen por sus sueños, porque con el esfuerzo y perseverancia todo se puede lograr.

“Practicar cualquier deporte es beneficioso, porque nos ayuda a tener una mejor salud física y mental. Lo más importante es practicar el deporte que más nos agrade, como a mí, me gusta el atletismo y el futbol, que lo he dejado de un lado porque estoy más enfocada en atletismo, y especialmente para evitar una lesión”, expresó la futura estrella de atletismo.

Pero más allá de sus impresionantes resultados en la pista, la niña atleta irradia una pasión contagiosa por el deporte. Su amor por correr no conoce límites, y su determinación para superarse a sí misma es verdaderamente inspiradora.

“Agradezco a mi papá, Santos Félix Soveranes, por apoyarme en mis entrenamientos, al igual a mi maestro Ranfiel. A mi mamá María de Jesús, a mi directora Jacqueline Sierra, a mi maestra Ivonne Cázarez, a mis amigos y amigas de la escuela, y a toda mi familia, que creen en mí y me motivan a seguir luchando por mis sueños”, expresó la alumna de sexto grado de primaria.

Perseverancia y pasión

En un mundo donde el talento y la dedicación son cruciales, Félix Beltrán destaca como un ejemplo de lo que se puede lograr con perseverancia y pasión. Su ascenso meteórico en el mundo del atletismo es un testimonio de su arduo trabajo y su compromiso con la excelencia.

A medida que María Mercedes continúa su viaje en el mundo del atletismo, estamos seguros de que seguirá dejando una marca indeleble en cada pista que pise. Su determinación, su pasión y su talento son un recordatorio inspirador de que no hay límites para lo que se puede lograr cuando se persigue un sueño con todo el corazón.