Sangre y dignidad: hablemos de los derechos menstruales

La menstruación digna es un tema que ha ganado atención en los últimos años, ya que aborda la necesidad de garantizar el acceso a productos de gestión menstrual accesibles y de calidad, así como la eliminación del tabu y la discriminación en torno al ciclo menstrual.

En México, el Congreso aprobó en 2022 una reforma para declarar la menstruación digna como un derecho humano y establecer la obligación del Estado de garantizar el acceso gratuito a productos de gestión menstrual en espacios públicos, centros educativos y lugares de trabajo.

Sin embargo, la implementación de esta reforma ha sido lenta y desigual alrededor del país.

Otros países han logrado grandes avances en este ámbito. Escocia se convirtió en 2020 en el primer país del mundo en ofrecer productos menstruales gratuitos a todas las personas que los necesiten.

En Kenia, se eliminó en 2004 el impuesto sobre los productos de higiene menstrual. Además, diversos estados de India han implementado programas para distribuir toallas higiénicas gratuitas en escuelas.

Además de garantizar el acceso a productos de gestión menstrual, es fundamental abordar la desinformación que rodea a la menstruación. Según un estudio de UNICEF, en México, el 25% de las niñas y adolescentes no acuden a la escuela durante su periodo por vergüenza o falta de instalaciones adecuadas.

Iniciativas como la educación integral en salud menstrual y la normalización del tema en espacios públicos y privados son clave para combatir estos tabúes.

Si bien se han logrado avances en materia de menstruación digna a nivel global, aún queda un largo camino por recorrer. Es responsabilidad de los gobiernos y la sociedad en conjunto garantizar este derecho fundamental y eliminar las barreras que impiden a millones de personas vivir su ciclo menstrual con dignidad y sin discriminación.