Siempre se puede hacer el bien por una persona más, una decisión personal que nos convierte en mejores seres humanos
Por: Victor López
Siempre se puede hacer el bien por una persona más, una decisión personal que nos convierte en mejores seres humanos
Hasta el último hombre es una película de Mel Gibson que muestra la vida de Desmond Doss, un soldado estadounidense que fue el primer objetor de conciencia en obtener la Medalla de Honor.
¿Alguna vez nos hemos puesto a pensar que pasaría si hiciéramos el bien a una persona más? Si tan solo nos tomáramos el tiempo de ver por el otro durante algunos momentos podríamos salvarle la vida, no en un sentido literal, sino salvarle del egoísmo.
El filme protagonizado por Andrew Garfield, quien interpreta al soldado Doss, narra como este se enlistó en el ejército negándose por completo a tomar un rifle y ser un soldado médico en el frente de la batalla de Okinawa durante la Segunda Guerra Mundial.
Desmond tiene un sentido muy maduro sobre el valor de la vida, pues vivió con un padre maltratador que perdió a sus tres mejores amigos en la guerra. De ahí nace el deseo de Desmond de ir a la guerra a salvar vidas, no a terminarlas.
Muestra que una persona debe ser fiel a sus principios y convicciones cuando estas están dispuestas para ayudar a los demás. Durante todo el entrenamiento para la guerra Desmond se negó a hacer prácticas de tiro, lo cual hizo que casi fuera expulsado de su batallón e incluso ir a la corte marcial.
Esta negativa no era por orgullo o cobardía, sino porque había sido testigo del rencor que guardaba su padre hasta llegar a casi matar a su madre. Desmond no quería vivir con ese rencor ni tampoco quería provocarlo. Su negación a portar armas iba más allá: por su fe.
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La decisión de Desmond también tuvo consecuencias con sus compañeros ganándose la burla y el desprecio de la mayoría. Aquí entra otro de los temas importantes que toca la película, un dilema ético en donde la principal pregunta es:
¿Qué hacer? ¿Renunciar a tus propias convicciones para ganar el respeto de los demás o seguirlas sabiendo que serás rechazado por la sociedad? ¿Hacer el bien, aunque te ganes las burlas o ser como los que no tratan de hacer algún cambio positivo en el mundo en el que vivimos?
Nuestros valores personales deben llevarnos a servir a los demás, un servicio que no debería suspenderse ante las brutalidades que suceden en el mundo en el que vivimos. Desmond no desistió a pesar de ver lo atroz que podían ser los soldados durante la guerra.
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Las situaciones más difíciles y, sobre todo, las que vivimos en conjunto como sociedad pueden sacar lo peor o lo mejor de nosotros. Una decisión plenamente personal, que actualmente en tiempos de pandemia por el coronavirus podemos aplicar para el bien y el servicio de los demás.
Hasta el último hombre nos enseña que, aunque todo vaya en nuestra contra y la sociedad pueda llegar a despreciarnos, siempre podemos elegir ser mejores y decidir ayudar a una persona más.
Director: Mel Gibson
Género: Drama, bélica
Año: 2016
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