El amor de un padre no conoce límites. El padre de Ricardo le recuerda las veces que lo llevó por dosis de heroína ya que su cuerpo 'necesitaba la sustancia para sobrevivir'.
Por: Kenia Meza
A veces las circunstancias provocan que un alma noble e inocente voltee a ver el mundo de las drogas como salvación, con el afán de llenar los vacíos que encierra el corazón. Eso no funcionará nunca, al menos que quieras ser derrotado o busques tu muerte. Ricardo Vega es una víctima más de la esclavitud y tormento de estas sutancias..
“Cuando uno consume las drogas, llenas vacíos que piensas que tú los vas a llenar con eso (...) Sin saber que era un inicio de una esclavitud (...) Muchas veces intenté suicidarme. Dios me rescató del estilo de vida que yo llevaba”, testifica Ricardo Vega con el corazón amargo recordando la muerte de sus compañeros de adicción.
“¿No pasa nada?” se pregunta la asociación Malala Academia en relación a los efectos de las drogas en los jóvenes, en sus familias y en su ciudad. Y para mostrar la realidad de este mundo, nos comparte el noveno testimonial de la serie.
Conoce su historia completa:
Con esta campaña de prevención, Malala Academia busca generar conciencia sobre el consumo de drogas, el daño que provoca, y todo lo que pierden las víctimas de las drogas.
De esta manera, exhorta a la sociedad, medios de comunicación e instituciones a sumarse para disminuir los niveles de drogadicción en México. Y tú, ¿crees que “No Pasa Nada”?.
El amor de un padre no conoce límites. El padre de Ricardo le recuerda las veces que lo llevó por dosis de heroína ya que su cuerpo 'necesitaba la sustancia para sobrevivir'.
Hoy, Ricardo Vega se siente afortunado por poder compartir su testimonio y saber que las personas que le rodean lo quieren. Pero un profundo anhelo de su corazón es que todos sus amigos que se fueron, a corta edad por el consumo de drogas, estuvieran junto a él. Eso ya no sucederá, pero reiniciar la vida sano y limpio abre nuevos horizontes.