Libros y el medio ambiente

Dr. Xicoténcatl Vega Picos

Por: Dr. Xicoténcatl Vega Picos

Dr. Xicoténcatl Vega Picos

El medio ambiente no está en el medio. Uno no quiere ser agorero de malas nuevas, eso fue lo que le comenté a la Chaaavelitaaa en uno de los constantes chat que tenemos. Esto viene a colación porque muchos de los temas ambientales, desafortunadamente, ya tienen su tiempo y el listado sigue aumentando, sigue la mata dando pues. Pero vale la pena el señalarlos y pretendo hacerlo recordando algunos de ellos por medio de libros o notas que he leído.

Estos problemas, en la mayoría de los casos, traspasan fronteras y trastocan el estado de salud del planeta, algo así como lo definió Michael Crichton en su famoso libro “Parque Jurásico” con el “efecto mariposa”, que considero aplica perfectamente para varios de los problemas ambientales que actualmente estamos padeciendo y que dice: “una mariposa bate sus alas en Pekín y las condiciones meteorológicas de Nueva York son diferentes”.

Veamos qué tan fuerte las mariposas han continuado con su batir de alas.

Julio Verne en su libro “La isla misteriosa” de 1874 escribió lo siguiente: “inútil es añadir que aquel bosque, como la costa ya recorrida, estaba virgen de toda huella humana. Pencroff no observó más que huellas de cuadrúpedos, señales recientes de animales, cuya especie no podía reconocer”. Como no podemos reconocer ni clasificar científicamente a muchas de las especies en la actualidad.

Aquí aplica, desafortunadamente, la premisa: “si no conoces no puedes conservar”. Por ello la falta de recursos para la investigación es un lastre en el bienestar de la especie humana, quién no nos dice que podríamos tener la cura, por ejemplo, para el COVID 19 en alguna planta en China que aún no ha sido descubierta.

De los primeros problemas ambientales transfronterizos podemos recordar la “lluvia ácida” que se describió más o menos por los años 50s, esto es la mezcla de agua con emisiones de gases contaminantes, en su mayoría derivado de la combustión de hidrocarburos, que se encuentran en la atmósfera o en el suelo y que provocaban su acidificación produciendo serios problemas en los ecosistemas. Recuerdo que leí de una queja de Dinamarca al Reino Unido porque los “gases ingleses” afectaban los bosques de este país escandinavo (debo la cita).

Otro que también fue mediático fue la destrucción de la capa de ozono por el uso de varios contaminantes, entre ellos los clorofluorocarbonos (CFC) Afortunadamente la comunidad internacional se unió y firmó, en 1987, un acuerdo que se conoce como el “protocolo de Montreal” para prohibir su uso. Consideremos esto como un éxito de la comunidad mundial, pues poco a poco la capa de ozono se “ha curado” y se espera su recuperación en unos 30 años más. Por cierto, este acuerdo internacional es considerado como el punto de inflexión para otros convenios en materia ambiental y podemos encasillar como un esfuerzo que unió a varios países en su solución.

Es importante mencionar que estos CFC son considerados como gases de efecto invernadero y que aportaban una buena cuota al cambio climático, por ejemplo, una tonelada de CFC 11 equivale a 5,000 toneladas de CO2. Para fortuna su uso fue prohibido.

Juan Rulfo también tiene pasajes que pueden reflejar lo que hoy sucede, por ejemplo, en el “Llano en llamas” escribió “cae una gota de agua, grande, gorda, haciendo un agujero en la tierra y dejando una plasta como la de un salivazo. Cae sola”. Y si “cae sola” no es de mucha ayuda, ocupamos que caigan miles, cientos para paliar la sequía en la que seguimos.

El mismo autor escribió: “Y a la gota caída por equivocación se la come la tierra y la desaparece en su sed”. Problema local pero que puede aplicar a diversas regiones del planeta pues muchas de ellas tienen “sed”, incluyendo la tierra de los once ríos.

En el “Viaje del Elefante” (2008) de José Saramago, premio Nobel de Literatura, surge esta pregunta ¿a quién se le ocurre enviarle de regalo un paquidermo desde Portugal a Alemania al rey de ese país? Para empezar el elefante ya es una especie introducida; no recuerdo los años que manejó el autor, pero sucedió en su relato varios siglos atrás.

También en el libro se mencionó a un sirviente que dijo: “que seáis tan rápido como el gavilán y tan seguro como el vuelo del águila”, pues puede que sean rápidas y seguras esas rapaces, pero algunas de ellas ya se encuentran en estatus de conservación, por ejemplo.

Temas de interes

¿Rescate de un Pomarine Jaeger (Stercorarius pomarinus)

El primer combate aeronaval en el mundo sucedió en Topolobampo, Sinaloa

Si consideramos a esa “águila” como el águila imperial ibérica (Aquila adalberti) actualmente se encuentra listada “en Peligro de Extinción” en el Catálogo Español de Especies Amenazadas (Real Decreto 139/2011, de 4 de febrero, para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y del Catálogo Español de Especies Amenazadas).

En “Pedro Páramo” (1955) también de Juan Rulfo dice “El camino subía y bajaba: «Sube o baja según se va o se viene. Para el que va, sube; para el que viene, baja»” parece que vamos, colectivamente, de “subida”, cuando no es un problema que aún no le damos solución viene otro nuevo de “bajada” y con más viada que se suma a la cauda de problemas que seguimos arrastrando.

Para terminar podemos mencionar algo del libro icónico del movimiento ambiental llamado “La primavera silenciosa” de Rachel Carson (1962) que dice “se han necesitado millones de años para engendrar la actual vida terrestre; eras durante las cuales este desenvolver y envolver y diversificar la vida alcanzó un estado de ajuste y equilibrio con su medio ambiente”, a lo que le podemos agregar una frase que podría decir “que en menos de cinco siglos la especie humana se encargó de trastocarla en aras de un mejor futuro a costa de un despiadado abuso del planeta” o una de “El Principito” de Antoine de Saint Exupéry que dice “¡La Tierra no es un planeta cualquiera!” lástima que lo pretenda dominar la especie humana.

xicovegadirector@aaves.com.mx

https://aaves.com.mx/

Recomendamos leer

https://tusbuenasnoticias.com/culiacan/la-narnia-sinaloense-por-favor-no-la-destruyas/