Composterra es un proyecto en el que se quiere promover el reciclaje de residuos orgánicos y con el producto final; la composta, crear huertos urbanos, comunitarios y particulares.
Por: Tecnológico de Monterrey campus Sinaloa
Dos jóvenes de campus Sinaloa convierten los residuos orgánicos en la oportunidad de suelos más fértiles para su ciudad por medio de la composta.
Escrito por: Karen Valle | Campus Sinaloa
Jesús Avilés y Ximena Rivera son dos estudiantes de séptimo semestre del Tecnológico de Monterrey, campus Sinaloa que en respuesta a la problemática de residuos en el estado, desarrollaron Composterra.
De acuerdo a Jesús, Composterra es un proyecto en el que se quiere promover el reciclaje de residuos orgánicos y con el producto final; la composta, crear huertos urbanos, comunitarios y particulares.
La composta es producto del reciclaje de los residuos orgánicos y se utiliza como abono para los suelos, lo que mejora su calidad y fertilidad.
Es por ello que, Jesús y Ximena prospectaron este proyecto como una forma de aprovechar los residuos orgánicos y al mismo tiempo mejorar la calidad de los suelos de Culiacán.
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Por su parte, Ximena menciona que su proyecto ayuda brindando nutrientes naturales y orgánicos a los suelos, que son mejores en comparación con los nutrientes químicos que contaminan y con su mal uso pueden afectar la fertilidad del suelo.
Asimismo, Jesús destacó que en un concurso organizado por el Tec llamado Stardupeando, adquirieron el conocimiento y obtuvieron la recomendación de llevar un registro de evidencias de la cantidad que debía ser recolectada un futuro implementar su producto en huertos privados o comunitarios.
Actualmente estos jóvenes colaboran con diversas fruterías locales distribuidas en Culiacán y continúan en pruebas e investigaciones para desarrollar su proyecto.
El origen de la iniciativa
Los estudiantes notaron esta problemática durante el 2019 en una clase sobre huertos agroecológicos de la carrera de Ingeniería en Bionegocios, donde se les enseñó cómo se hacía la composta.
Pero lo que más captó su atención, fue cuando los llevaron a un tianguis donde venden fruta y verdura. Después de que los puestos fueron levantados, notaron la gran cantidad de desperdicio orgánico.
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Asimismo, Jesús resaltó que la pandemia por COVID-19 fue uno de los desafíos que enfrentaron, pero supieron aprovecharlo para desarrollar y clarificar su iniciativa.
“Durante la pandemia comenzamos a hacer composta en nuestras casas, con residuos del hogar y ya en marzo de este año comenzamos a recolectar los residuos en las fruterías cercanas” , comenta Jesús.
De la misma manera, Ximena destacó que otro de los grandes desafíos que enfrentaron fue la colecta de residuos, pero que gracias a sus aliados (fruterías, profesores) lograron ser más eficientes.
Los planes para Composterra en el futuro
Una de las responsables del área de emprendimiento en campus Sinaloa, Dioselinn Beltrán, destacó el beneficio que tiene para los estudiantes involucrarse en este tipo de proyectos.
“El desarrollar un emprendimiento social los hace construir un perfil emprendedor y habilidades para el desarrollo profesional sin dejar de lado el desarrollo personal que tendrán al ser empáticos con las problemáticas sociales”, expresó Dioselinne.
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De acuerdo a Ximena, Composterra inició con el objetivo del aprovechamiento de los residuos orgánicos sin embargo, buscarán aplicarlo para lograr la restauración de diversos parques en Culiacán.
Puedes conocer más sobre este proyecto en su página de Instagram: @composterracln.
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