Con su impresionante presencia, significado histórico y la oportunidad de conectar con la naturaleza, este coloso es un destino ineludible para aquellos que visitan la región central de México.
Por: Fernando Augusto Contreras Falcó
El majestuoso Volcán La Malinche, también conocido como Matlalcueye, se yergue imponente cerca de la ciudad de Puebla, ofreciendo un paisaje natural impresionante y una oportunidad única para los amantes del ecoturismo y el montañismo.
Ubicado a unos 22 kilómetros al noreste de la capital poblana, el volcán es parte de la Sierra Nevada, una cadena montañosa que atraviesa varios estados de México. Con una altitud de aproximadamente 4,461 metros sobre el nivel del mar, La Malinche es una de las principales atracciones turísticas de la región debido a su accesibilidad y belleza natural.
El volcán debe su nombre a La Malinche, una mujer indígena también conocida como Malintzin o Doña Marina, quien fue una figura clave durante la conquista española de México. La montaña tiene un significado histórico y cultural importante para las comunidades locales y la nación mexicana.
A lo largo del año, excursionistas y amantes de la naturaleza se aventuran a subir las laderas del volcán en busca de vistas panorámicas incomparables y una experiencia única en la cima. La ascensión, que varía en dificultad según la ruta elegida, ofrece la oportunidad de apreciar la diversidad de la flora y fauna que habita la región, así como la riqueza de los paisajes circundantes.
Lee también: Descubre los senderos del volcán la Malinche en PueblaAdemás de su valor recreativo, La Malinche también desempeña un papel importante en la preservación del medio ambiente y la regulación climática de la zona. La conservación de esta área natural es una prioridad para las autoridades locales, que trabajan en conjunto con organizaciones ambientales para proteger su rica biodiversidad.
En resumen, el Volcán La Malinche, cercano a la ciudad de Puebla, es un tesoro natural que atrae a turistas y entusiastas del aire libre por igual. Con su impresionante presencia, significado histórico y la oportunidad de conectar con la naturaleza, este coloso es un destino ineludible para aquellos que visitan la región central de México. Puedes acceder al parque a partir de las 7:00 am.