Sabor y tradición se fusionan en la irresistible Guacamaya de León, Guanajuato

En las pintorescas Calles de León, Guanajuato, Brillan la Autenticidad y el Encanto de un Manjar Culinario: ¡La Guacamaya!

Por: Martín Yamin

En el corazón de la cautivadora ciudad mexicana de León, Guanajuato, se despliega un tesoro gastronómico auténtico que ha conquistado los paladares de sus habitantes: ¡la guacamaya! Este icónico platillo trasciende la mera alimentación para convertirse en un abrazo cálido de tradición y sabores vibrantes. 

Imagina un bolillo dorado y crujiente que, al desvelar su interior, revela su alma, esperando ser colmado con tesoros de sabor. Y aquí entra en juego el chicharrón de puerco, cuyo proceso artesanal de dorado en cazos de cobre le otorga una textura crujiente y un sabor inolvidable. Pero eso no es todo, se añaden rebanadas de aguacate para infundir frescura y carácter. 

Sin embargo, el auténtico arte reside en la salsa, un misterio de sabores y picante. ¡Las variantes son incontables! La guacamaya siempre reserva sorpresas. Y no podemos pasar por alto los cueritos encurtidos que añaden una explosión de texturas. 

El ritual de ensamblar la Guacamaya es casi un acto ceremonial: hojas de chicharrón, aguacate, salsa de chile de árbol para los valientes, y la lluvia de limón y sal para coronarla. ¡Está lista para cautivar los paladares más exquisitos y hambrientos! 

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Sin embargo, la historia no termina aquí. Deambulando por las calles, uno se topa con los famosos "carritos de guacamayas", triciclos transformados en santuarios ambulantes de este manjar. Estos vendedores ambulantes, con sus ingeniosas cajas colgantes y canastas, son los custodios de la tradición.

Pero, ¿Por qué "Guacamaya"? 

Cuenta la historia que esta emblemática torta de chicharrón se originó en la década de 1950, cuando un obrero solicitó a un vendedor de tortas llamado”Jose el soñador” que rellenara su bolillo con 'duro' y una salsita. El resultado resultó tan picante que el obrero no dejaba de emitir ruidos similares a los de un pájaro, y así es como este delicioso bocado obtuvo su nombre, en honor a las vibrantes aves. 

La guacamaya de León, Guanajuato, es mucho más que una delicia culinaria; es una ventana a la rica herencia y al espíritu festivo de esta encantadora ciudad. Cada bocado es un tributo a la pasión por la comida y la tradición que vive en cada rincón de este rincón mexicano.