Los nuevos planteamientos económicos están motivando a superar abstracciones ideológicas, como la autorregulación del mercado, y cambiarán jerarquías: en el centro de toda política y proyecto económico estarán las personas y no el dinero ni ninguna mano invisible
Por: Francisco Cuamea
El sentido de la economía es y será que nadie quede atrás.
Los nuevos planteamientos están motivando a superar abstracciones ideológicas, como la autorregulación del mercado, y cambiarán jerarquías, es decir, que en el centro de toda política y proyecto económico estarán las personas y no el dinero ni ninguna mano invisible. Seguro le suena romántico, pero así será muy pronto.
Hay distintos acercamientos para este cambio del sentido de la economía. Uno de ellos es el de Christian Felber, especialista en economía sostenible y alternativas para los mercados financieros.
Este catedrático de economía en la universidad de Viena propone un sistema económico no capitalista, pero tampoco comunista ni socialista. Está basado en la cooperación y cuyo objetivo es maximizar el bienestar de la sociedad. Le llama Economía del Bien Común.
Por medio de estos antecedentes, es como podemos intentar corregir el camino de nuestro sistema económico. Hay más opciones que las conocidas por largas épocas.
El conocimiento avanza.
La agenda económica propuesta en México
En México se dan los primeros pasos hacia algo diferente y justo. Dentro de los 16 temas incluidos en el documento Propuestas Ciudadanas. Agendas de la Sociedad Civil 2024-2030, se encuentra la economía.
En este rubro, la organización de la sociedad civil, México, ¿Cómo Vamos? delinea la ruta propuesta para generar un crecimiento económico sustentable y sostenido, “a fin de generar más y mejores empleos y fomentar el bienestar para todas las personas. Lo que importa es avanzar; saber cómo vamos no solo cómo estamos, sino proponer mejores rutas para una mayor sustentabilidad”.
Puntos clave de la ruta económica 2024-2030
La agenda económica presentada por México, ¿Cómo Vamos? busca promover un desarrollo sostenible y equitativo, con estrategias que fortalezcan la competitividad, reduzcan desigualdades y prioricen la innovación.
Entre los puntos clave, comentamos los siguientes:
1. Crecimiento económico sostenible
Diversificación económica: Impulsar sectores estratégicos que reduzcan la dependencia de industrias tradicionales, fomentando tecnologías limpias y proyectos innovadores.
Desarrollo regional equilibrado: Implementar políticas que favorezcan a regiones históricamente marginadas, para cerrar brechas económicas entre estados.
Economía circular: Fomentar modelos de negocio sostenibles que prioricen la reducción de residuos, la reutilización y el reciclaje.
2. Inversión en innovación y competitividad
Apoyo a pequeñas y medianas empresas (PYMES): Facilitar el acceso a financiamiento y herramientas digitales para mejorar su productividad.
Impulso a la investigación y desarrollo (I+D): Aumentar la inversión pública y privada en ciencia y tecnología como pilares del crecimiento económico.
Educación para la competitividad: Crear programas educativos que alineen la formación laboral con las demandas de los sectores productivos emergentes.
3. Reducción de desigualdades
Sistemas fiscales progresivos: Implementar impuestos más justos para quienes tienen mayores ingresos, garantizando una redistribución equitativa de la riqueza.
Empoderamiento económico de grupos vulnerables: Diseñar programas específicos para integrar a mujeres, jóvenes y comunidades indígenas en la actividad económica.
Salarios dignos: Establecer políticas que garanticen remuneraciones suficientes para cubrir necesidades básicas y fomentar la calidad de vida.
Otras propuestas complementarias
Promoción de alianzas público-privadas: Fortalecer la colaboración entre gobierno, empresas y sociedad civil para generar empleo y aumentar la inversión en infraestructura.
Digitalización de la economía: Incentivar la adopción de tecnologías digitales para modernizar procesos productivos y facilitar el comercio electrónico.
Sostenibilidad fiscal: Asegurar la eficiencia en el gasto público y la transparencia en el uso de recursos para evitar déficits que afecten la economía a largo plazo.
La propuesta de México, ¿Cómo Vamos? para el periodo 2024-2030 recoge sin duda mucho de la conversación sobre el nuevo sentido que la economía debe tener para las personas.
Como vemos, esta agenda pone énfasis en que un desarrollo económico robusto debe estar vinculado a la equidad, la sostenibilidad y la innovación.
Así como a veces percibimos que este mundo acabará con un apocalipsis, también hay otra conversación que cada vez toma más fuerza: La de que este mundo será más justo.
Y así será, ya verá.