Estudiantes de la Academia de Danza Folclórica Pueblo Mestizo clausuraron el ciclo con un alegre y colorido festival de unificación de los pueblos.
Por: Juan Francisco Sotomayor
Villa Juárez, Navlato, Sin.- Con gran alegría y colorido, mostrando las reminiscencias de la cultura mesoamericana, se desarrolló el festival de clausura de la Academia de Danza Folclórica Pueblo Mestizo. Con danzas autóctonas recrearon al público de Villa Juárez.
Fue un año de aprendizaje constante, bajo la instrucción del profesor Jesús Valero Quintero Machado, lo que le permitió a un grupo de niños, jóvenes y adultos llegar a niveles de danza profesional para participar en espectáculos culturales.
Durante el festival de clausura en la Plazuela de Villa Juárez, coorganizado por la alumna Sarahi Maytorena Montes, los estudiantes tuvieron un aplaudido evento donde presentaron las danzas de: El conejo, del estado de Veracruz, interpretado por niños; La bruja, la iguana y la gallina chuchumbe, todos del estado de Veracruz, interpretado por adultos; y la Danza de los viejitos, de Michoacán, interpretado por niños; El Huasteco, por adultos; Sinaloa, por niños; y Zacatecas, por adultos.
La promoción de danzas autóctonas es un orgullo en Villa Juárez, ya que esta cabecera de sindicatura representa el crisol mestizo de Sinaloa, donde se funden la mayor parte de las etnias del centro y norte de México, debido a las migraciones cíclicas que atraen a miles de jornaleros agrícolas reunidos por la oportunidad de trabajar en los campos productores de hortalizas.
Se estima que en Villa Juárez hay hablantes de unas 20 lenguas de las etnias de Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Puebla, Veracruz, Michoacán y la sierra Tarahumara, principalmente. Todos ellos forman parte del genuino mosaico de la gran diversidad étnica o lingüística de las culturas mesoamericanas que se extendieron hasta Centroamérica desde tiempos precolombinos.
A través de la danza folclórica en Villa Juárez todos sus habitantes se homogenizan en un mismo sentimiento por el contacto interétnico, generando una sociedad multicultural y diversa. Que la danza hable el lenguaje universal que perpetúa la grandeza de los pueblos de México.
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