Cuando somos niños nos caracterizamos por ser seres creativos, soñadores, con pasiones y visiones refrescantes
Por: Jesús Moreno
Cuando somos niños nos caracterizamos por ser seres creativos, soñadores, con pasiones y visiones refrescantes de lo que queremos en nuestro mundo y en nuestro futuro; curiosamente estas características a medida que crecemos se van perdiendo y se nos enfoca en estudiar más, en conseguir mejores calificaciones, el tener toda nuestra atención en cumplir con los deberes y con los conocimientos académicos que todos los niños de nuestra edad deben tener. Esto ha provocado que actualmente nos estemos perdiendo de niños que desde temprana edad presentan habilidades natas para convertirse en un emprendedor.
Como sociedad tenemos la obligación de empezar a detectar a estos niños y enseñarles a ser emprendedores, claro a los que muestran estas características, así como actualmente se fomenta y se les da herramientas a los alumnos que muestran habilidades para matemáticas o ciencias lo haríamos con los que tienen habilidades para ser emprendedores.
Tendríamos a todos estos niños propagando negocios o ideas que podrían capitalizarse en oportunidades de empleo para muchos más ciudadanos.
En un mundo que se encuentra en cambio constante, la innovación y creatividad se han vuelto clave importante para el éxito, y estas son características que muchos niños en la actualidad poseen. Por ello, podemos decir que el emprendimiento infantil se puede presentar como una oportunidad con un potencial enorme para el desarrollo del futuro.
¿Cómo distingues un niño emprendedor?
Dejemos claro que no estamos hablando como tal que este niño podría montar de inmediato un negocio formal, pero si son niños que se caracterizan por la gran iniciativa que muestran para todas las actividades de su vida cotidiana, la gran capacidad de identificar oportunidades y la capacidad que tienen para desarrollar sus ideas o visiones. Estos niños muestran un claro espíritu emprendedor rompiendo el molde de lo que normalmente se espera de un niño.
Beneficios para los niños y para la sociedad
Desarrollo de habilidades fundamentales: El ser un niño emprendedor les permite el desarrollo de herramientas como la comunicación, toma de decisiones, creatividad, trabajo en equipo y resolución de problemas; estas herramientas podrán ser de suma utilidad a lo largo de su vida.
Preparación para el futuro: El roce que pueden tener estos niños con la actividad empresarial es un experiencia que pocos niños experimentan, por lo que les da una ventaja competitiva a futuro, al saber como se maneja la sociedad en cuestión de comercio y satisfacer las necesidades.
Responsabilidad: El ser emprendedor les permite a los niños asumir responsabilidades y obligaciones desde corta edad, fomentando así valores como la responsabilidad y el compromiso.
Aumento de confianza: El poder capitalizar sus sueños, ideas y visiones en cosas palpables y tangibles, hace que los niños desarrollen confianza en sí mismos, volviéndose más seguros y sabiendo que sus ideas también son valiosas.
Pensamiento crítico: El emprender implica analizar distintas situaciones, ver riesgos que se pueden presentar y tomar decisiones de forma crítica.
Actualmente, por como se ha desarrollado la sociedad, se puede considerar que el mundo está preparado para recibir a estos niños emprendedores. Hemos visto cómo cada vez existen más escuelas e instituciones que se enfocan en desarrollar las habilidades natas de los niños.
Es importante tener en cuenta como lo dije anteriormente, que ser un niño emprendedor no significa que creara un negocio super exitoso y rentable. Sino que se enfoca en fomentar y cultivar en los niños esta mentalidad, dónde la creatividad, innovación y perseverancia sean valores fundamentales en su vida, esto les permitirá un desarrollo personal, económico y social.
¡Mostremosle lo que es emprender y esperemos a esta nueva generación de líderes!