Y de pronto quedó el hogar como epicentro de todo
La pandemia del Covid vino a descubrir los multi usos y funciones que puede tener el hogar y descubrimos que los grandes literatos y artistas trabajaron en casa.
La pandemia del Covid vino a descubrir los multi usos y funciones que puede tener el hogar y descubrimos que los grandes literatos y artistas trabajaron en casa.
Y vino a quedar el hogar como epicentro de todo. La mayoría de las cosas ya estaban en casa y no habían sido descubiertas por el mundo, faltaba que un confinamiento tan largo como el del Covid se activara para que en ese espacio se hicieran nuevas funciones. Para que se descubriera también que los grandes literatos y artistas hacían sus obras desde casa.
El Arq. Felipe Leal Fernández, presidente del Seminario de Cultura Mexicana, nos mostró en fotografías los espacios privados donde los hombres más sobresalientes de los últimos siglos hicieron sus aportaciones en bien de la humanidad, eran casas, traspatios, azoteas, zaguanes y bodegas reacondicionadas.
Casa estudio de Diego Rivera y Frida Kahlo
Los grandes hombres fueron los inventores del “home office”, dice convencido. Por comodidad y privacidad hicieron de sus hogares el espacio donde pensaron, crearon, inventaron, compusieron, pintaron y pensaron diferente, dijo el especialista al ir mostrando las fotografías de la arquitectura, diseño y modo de cómo las construcciones se acondicionaron a la imaginación y gusto, para que fueran el escenario pequeño donde grandes talentos concibieron el mundo.
Casa museo de Salvador Dalí
Felipe Leal Fernández disertó su conferencia “el hogar como epicentro”, organizado por el Seminario de la Cultura Mexicana en coordinación con el Archivo Histórico General del Estado de Sinaloa y la Universidad Autónoma de Occidente.
Leal Fernández habló de la flexibilidad que da el hogar permitiendo que toda clase de profesionistas y estudiantes cambien su actitud y expresión física haciendo lo mismo que antes hacían en un espacio reservado, pero ahora en los espacios arrinconados de un hogar. Porque en casa puedes tomar otra posición. Con las ropas cómodas y las posiciones que el medio permite.
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Ahora, dijo, la casa es el gimnasio junto a la cafetera, la caminadora invade la puerta chica, un tapete es el gimnasio colectivo de la madre y los hijos, la salita es el núcleo de las citas de amor. La puerta al salón y el habitáculo, son la búsqueda por atrapar la luz y ver fuera.
Y aparece Juan Villoro, el escritor con sus perros agigantados haciéndolo diminuto en su espacio de casa, las mascotas en la vida de los personajes. Porque lo lúdico se da en las casas, en el juego, y aparece la comunicación que no sólo se da entre humanos, sino entre agentes de la naturaleza, en lo que llamamos domesticado.
Así va viendo el arquitecto cada espacio de los hogares que las fotos durante la pandemia están mostrando al mundo. El retrato muestra a un anciano con una mirada perdida, que atraviesa la ventana ordenando la mente.
El arquitecto Felipe Leal Fernández ha visto a los estudiantes de primaria saturando la mesa del comedor con sus cuadernos, una madre angustiada juntando voluntades para la educación a distancia. Ha visto a bachilleres y universitarios adueñándose de un rincón de la casa para continuar la vida educativa.
Y descubre que el mundo entero por la pandemia empieza a darse cuenta que es el hogar como epicentro del pensamiento, de los planes, de las ideas; donde se va la vida, donde se acomodan los pensamientos; es el hogar de la reflexión, es un templo, un lugar de amigos y familia. Forja y amasa nuestras costumbres, anhelos y preocupaciones.
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Este confinamiento es duro, rompe toda estabilidad que socialmente en el exterior se cumple, dice. Entusiasmado de que la calidad humana y educativa se da en estos ambientes.
Felipe Leal está convencido que esta experiencia de confinamiento en el mundo servirá para que en tema de salud pública se hagan muchos ajustes en los hogares, en ambientes internos como del exterior. Y dijo que nunca podemos perder la capacidad de llevar algo del espacio público a la casa. Habitar el hogar son muchos verbos interactuando.
En la conferencia la Dra. Sylvia Paz Díaz Camacho, rectora de la Universidad Autónoma de Occidente, comentó sobre la influencia que el hogar ejerce para que lleguemos a ser lo que ahora somos, y sumó su gratitud porque más de 17 mil jóvenes sinaloenses, que conforman el Ciclo Escolar 2020-2021, decidieran continuar su vida bajo la tutela de la gran familia Lince, en su formación profesional.
Gilberto López Alanís, presidente del Seminario de Cultura Mexicana, corresponsalía Culiacán, y el Director del Archivo Histórico General de Estado de Sinaloa, celebró que este evento se diera dentro del convenio de colaboración de la UAdeO con el Seminario de Cultura Mexicana.
