¿Cómo mejorar la seguridad vial de una ciudad?
Usar el autobús, procesos para obtener licencia estrictos y colocar señalamientos adecuados puede salvar vidas.
Usar el autobús, procesos para obtener licencia estrictos y colocar señalamientos adecuados puede salvar vidas
¿Sabías que en América alrededor de 155 mil personas pierden la vida en un accidente de tránsito, según la OPS? Para desarrollar ciudades más estables es muy importante mejorar la seguridad vial. En esta nota te compartimos algunas ideas para lograrlo.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) define la seguridad vial como “las medidas adoptadas para reducir el riesgo de lesiones y muertes causadas en el tránsito”. Por lo que sugiere mejorar la legislación para proteger a los usuarios más vulnerables de las calles: los peatones, ciclistas y motociclistas, así como los conductores.
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Para comprender la importancia de la seguridad vial de las ciudades en la región de las Américas, debes saber lo siguiente:
- El 11% del total de las muertes causadas por el tránsito, casi 155 mil fallecimientos equivalentes al 13% del total de la población mundial y al 25% del número total de vehículos registrados, se registran aquí.
- Segunda tasa de muerte a causa del tránsito más baja de las regiones de la OMS (15,6 por cada 100 mil habitantes).
Accidentes viales
La Organización Mundial para la Salud (OMS) puntualiza que los factores de riesgo que intervienen en la aparición del accidente son: velocidad del vehículo insuficiente o excesiva, fatiga, edad del conductor, desplazamientos nocturnos, condiciones del vehículo, mantenimiento de las vías y la visibilidad escasa del ambiente o del conductor.
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De ahí que los elementos que influyen en la gravedad del accidente son:
- Tolerancia de la persona accidentada
- Velocidad
- No usar el cinturón de seguridad
- Caso defectuoso en la caso de ciclistas o motociclistas
- Ingesta de bebidas alcohólicas o drogas
Soluciones para reducir los accidentes de tránsito
El artículo “Mejorar la seguridad vial”, publicado en Elsevier por J.A Valtueña (2006), señala que “para reducir al mínimo posible (nunca podrán eliminarse del todo los malos conductores y las vías de tráfico inseguras) los accidentes viales y su gravedad (...) propone dos tipos de intervenciones relativas principalmente al conductor y referentes a la estructura de las calles, carreteras y autopistas”.
Intervenciones de carácter individual
1. Permiso de conducir por etapas
El modelo neozelandés establece un examen escrito, teórico oral y reconocimiento de la vista en la fase principiante (permiso para conducir de 6 meses). Después, el conductor novel, tiene derecho a un permiso de conducir pero no puede manejar entre las 22.00 y las 05.00 h, se le prohíbe el transporte de pasajeros de menos de 20 años y su tasa de alcoholemia está limitada a 0,3 g/l. Una vez pasadas estas dos fases, se obtiene el permiso de conducir definitivo.
2. Permiso de conducir por puntos
Penalizar al conductor proclive a los accidentes es igualmente el principio del permiso de conducir por puntos. El principal inconveniente de este método es la pesada carga burocrática que implica su aplicación.
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Intervenciones de carácter colectivo
1. Mejorar en lugares con más accidentes
Los tránsitos conocen la frecuencia de los accidentes según la vía, por lo que el mismo artículo sugiere: Mejorar el alumbrado y la señalización, establecer pasos subterráneos para peatones, pasos peatonales bien identificados, aplicación de un revestimiento antideslizante en la calle e instalar refugios centrales.
2. Usar el autobús
Los desplazamientos en camión son más seguros, además de ser más económico en comparación con el transporte individual.
3. Bajar la velocidad del tráfico
En Austria y Suiza la velocidad en zonas residenciales está limitada a 30 km/h.
La seguridad vial es responsabilidad de todos los habitantes de cada urbe. Analizar las problemáticas permite adaptar las soluciones acorde a las necesidades de los ciudadanos.
Imagen: La Vanguardia