Rubén Guerrero creció entre cocos, hoy es encargado de un legado familiar refrescando corazones en Culiacán
Rubén Guerrero Félix, con 20 años, continúa el legado familiar de la venta de cocos, un negocio que comenzó su abuelo en 1995. Gracias a su dedicación y esfuerzo, ha impulsado a Cocos Guerreros a alcanzar un mayor crecimiento y éxito
Culiacán, Sinaloa.- Desde pequeño, el sonido del machete cortando cocos formó parte fundamental de la vida de Rubén Guerrero Félix. Creció en un ambiente rodeado de este fruto tropical, pues tanto su abuelo, Rubén Guerrero Ángulo (QEPD), como su padre, Rubén Guerrero Higuera, se dedicaron al negocio familiar de la venta de coco y sus derivados.
Más de dos décadas de sabor a coco
Hoy, con 20 años, Rubén es el encargado de continuar con la tradición, demostrando que el éxito se construye con raíces firmes y un espíritu tenaz.
Cocos Guerreros, el negocio familiar, fue fundado en 1995 por su abuelo con mucho esfuerzo, perseverancia y entusiasmo. Inicialmente ubicado en la carretera México 68, la empresa se mudó dos años después a la colonia Amado Nervo, en la avenida Obregón, donde ha prosperado durante más de dos décadas ofreciendo productos derivados del coco, como agua y pulpa.
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“Todo inició por mi abuelo, que empezó a traer coco por mayoreo. Al principio se vendían solo cocos con sal, limón y chile, pero luego quiso probar con los cocos acompañados de mariscos. Así fuimos ampliando la oferta hasta formar la carta de productos que tenemos hoy”, reveló Rubén.
Con el paso del tiempo, el negocio pasó a manos de su padre, quien se encarga de la compra y venta de cocos de alta calidad en diferentes lugares del país. Debido a la exigencia del trabajo, su padre decidió hace tres años que Rubén continuara al frente de la empresa familiar.
Con machete en mano, Rubén corta los cocos, extrayendo el agua para sus clientes, y separa la pulpa, la cual adereza según lo que los compradores le pidan. “Se necesita mucha habilidad para cortar los cocos, porque hay que hacerlo con cuidado para evitar accidentes”, comentó el joven emprendedor.
El trabajo diario en Cocos Guerreros no solo le brinda satisfacción a Rubén, sino también a su familia. “Ver el rostro de felicidad de nuestros clientes por el buen sabor de los cocos y sus derivados es lo que nos motiva a seguir todos los días”, afirmó con una sonrisa.
En el negocio de Guerrero Félix se ofrecen una amplia variedad de productos derivados del coco, pero los más solicitados por los clientes son el coco con camarón, el agua y la pulpa de coco, así como la horchata de coco, una receta que él mismo prepara con una fórmula secreta.
Y aseguró que aquellos que consumen su agua de horchata de coco regresan siempre por su sabor único e inigualable, que ha conquistado el gusto de quienes la prueban.
Además, Rubén mencionó que, aunque su negocio cuenta con cómodas instalaciones, muchos de sus clientes prefieren el servicio de "ordene y recoja", el cual implementaron durante la pandemia y se ha convertido en el favorito de muchos de sus clientes.
Este servicio les permite disfrutar de sus productos sin necesidad de salir de sus vehículos, brindando mayor comodidad y rapidez a quienes visitan Cocos Guerreros en la colonia Amado Nervo.
El joven destaca también el éxito que ha tenido la venta de agua de coco, no solo por su delicioso sabor, sino también por sus múltiples beneficios para la salud.
“Muchos de nuestros clientes vienen a comprarla porque los doctores se las recetan hasta para contrarrestar el Dengue. El agua de coco es excelente para hidratar el cuerpo, tiene pocas calorías, es rica en potasio y ayuda a regular la presión sanguínea”, explicó Rubén.
El entusiasta joven ha hecho una pausa en sus estudios, aunque tiene la firme intención de retomarlos pronto, porque sabe que la educación es fundamental para continuar creciendo y ampliar el alcance de su negocio familiar en el futuro.
Guerrero Félix es un claro ejemplo de que el camino hacia el éxito no es fácil, pero con esfuerzo, pasión y un profundo respeto por las raíces familiares, todo es posible. Su historia nos permite reflexionar que, aunque los desafíos puedan parecer grandes, el compromiso y la perseverancia son las claves para superarlos.
A través de su dedicación al negocio que comenzó su abuelo y continuó su padre, Rubén ha aprendido que cada corte de machete, cada litro de agua de coco, y cada sonrisa de sus clientes son la recompensa a una vida de trabajo constante.
Con una mirada al futuro y un corazón lleno de sueños, Rubén Guerrero Félix, invita a las nuevas generaciones a no rendirse ante las dificultades y a creer en el poder de la constancia para lograr sus metas.
Porque, como él mismo lo afirmó, "los sueños se logran con disciplina y constancia", y hoy, más que nunca, su vida es un testimonio de qué, con raíces firmes, todo es posible.
Ubicación y teléfono para ordenar y recoger
Cocos Guerrero se ubica sobre la avenida Álvaro Obregón, frente al teatro griego del parque Culiacán 87, en la colonia Amado Nervo.
Rubén, no solo vende agua y pulpa de coco, sino también deliciosas cocadas y helados preparados por su familia. Estos productos destacan por su sabor artesanal.
Además, Rubén regala las cáscaras de coco a personas que las utilizan para manualidades o las trituran para fabricar sustrato, un material muy valorado en plantaciones hidropónicas. De esta forma, su negocio también contribuye al reciclaje y aprovechamiento de recursos.
El horario de atención es de 9:00 a.m. a 6:00 p.m., ofreciendo productos de calidad, frescos y derivados del coco. Y pueden solicitar el servicio de ordene y recoja al teléfono: 6674 86 36 05.
