Más que un pastel: La historia de María Isabel y su negocio que endulza vidas en Culiacán
María Isabel Rodríguez, quien emigró de Torreón a Culiacán, vio una oportunidad en las dificultades y creó su negocio Isa Cakes desde cero
"Un pastel puede cambiar vidas", afirma María Isabel, mientras decora uno de sus exquisitos postres.
Hace ocho años, María Isabel Martínez Rodríguez llegó a Culiacán buscando un mejor futuro para su familia. Originaria de Torreón, Coahuila, dejó atrás su tierra natal debido a los bajos salarios y las limitadas oportunidades laborales.
Su esposo, Jaime Estrada Calderón, de oficio yesero, había llegado a la ciudad dos años antes para explorar nuevas posibilidades. Con determinación y valentía, María Isabel y sus tres hijas se reunieron con él para comenzar una nueva etapa en sus vidas.
¡Recibe las últimas noticias!
"En Torreón, el trabajo está muy mal pagado", comenta María Isabel, de 45 años, mientras recuerda los motivos que la llevaron a tomar esa importante decisión. Desde entonces, la familia ha vivido en la colonia Zona Dorada, sector Los Ángeles, en el mismo departamento que rentaron al llegar.
El inicio de un sueño
Hace cinco años, María Isabel se inició en la repostería por azares del destino, actividad en la que ha encontrado su pasión y es su forma de vida.
Animada por unas amigas y aprovechando las habilidades que había aprendido de manera autodidacta viendo tutoriales y videos, Isabel comenzó a vender bollitos y pays de queso en el tianguis frente a una secundaria Nueva Creación.
"Una clienta me dijo: 'Por qué no te avientas a hacer un pastel', y aunque al principio me dio miedo, me decidí. Gracias a Dios, les gustó", comparte para Tus Buenas Noticias.
Así nació Isa Cakes, el negocio que hoy en día se ha convertido en su sustento principal. Lo que comenzó con diez clientes ha crecido exponencialmente, alcanzando más de 200.
“Mis clientes están encantados y me recomiendan por la calidad de mi trabajo”, asegura con orgullo. Su creatividad y paciencia se ven reflejadas en cada pastel, decorado con esmero para todo tipo de eventos.
Altas y bajas en el camino
Como todo emprendimiento, Isa Cakes ha enfrentado desafíos. María Isabel alquiló un local en la colonia Las Glorias, en el mismo sector, donde pudo expandir su producción. Sin embargo, las bajas ventas de los últimos meses, sumadas a los altos costos de renta y servicios, la obligaron a cerrar el espacio.
Desde hace dos meses, trabaja nuevamente desde su hogar, donde adaptó su cocina y sala para continuar atendiendo a sus clientes.
La crisis económica y el aumento en los costos de insumos han sido otros retos. “El huevo, el aceite, todo ha subido mucho. Trato de mantener precios accesibles y ofrecer opciones a mis clientes para que nadie se quede sin probar nuestros postres”, explica.
Pese a estas dificultades, su espíritu emprendedor no se ha quebrantado. “Me gusta la repostería, y hay que darle hasta donde se pueda”, afirma con determinación.
El apoyo familiar y la satisfacción personal
María Isabel reconoce que no habría logrado avanzar sin el respaldo de su familia. Su hija menor, Paola, quien aún vive con ella, la ayuda en el negocio, al igual que una amiga cercana que colabora desde hace dos años.
Aunque María Isabel nunca imaginó dedicarse a la repostería, hoy se siente agradecida por haber encontrado en esta actividad una forma de vida.
“Yo era panadera; allá en Torreón le dicen pan de horno”, recuerda.
Para ella, la mayor recompensa es la satisfacción de sus clientes. "En mi página de Facebook tengo todas las conversaciones donde me dicen que les encantaron los pasteles. Eso me motiva a seguir adelante".
Isa Cakes: más que un negocio
Isa Cakes ofrece una amplia variedad de productos, desde pasteles para bodas y piñatas hasta roscas, pays y fuentes de chocolate. María Isabel también organiza banquetes y personaliza cada pedido según las necesidades del cliente.
Gracias a las redes sociales, ha logrado ampliar su alcance, llegando incluso a clientes de colonias alejadas como Alturas del Sur. “Ellos me contactan por Instagram o Facebook, y con gusto organizo el envío”, explica.
María Isabel sueña con seguir creciendo y consolidando su negocio. Aunque nunca se vio como repostera, hoy en día no imagina su vida sin Isa Cakes.
“Hay rachas difíciles, pero siempre vale la pena seguir adelante”, concluye con una sonrisa, demostrando que los sueños pueden lograrse con pasión y esfuerzo.
Para quienes deseen probar sus deliciosos pasteles o contratar sus servicios, Isa Cakes se encuentra en Puerto Barcelona No. 5153-B, en la colonia Zona Dorada. También pueden contactarla a través de sus redes sociales: Isa Cakes en Facebook e Instagram, o por WhatsApp al 871-357-9760.
Un ejemplo de reinvención
La historia de María Isabel es un ejemplo de cómo la determinación y el trabajo arduo pueden transformar vidas. Sus panecillos son un deleite para sus clientes y un alivio para su economía.
Isa Cakes es más que un negocio; es la materialización de un sueño y un testimonio de la resiliencia de una mujer que, contra todo pronóstico, ha endulzado los paladares y los corazones de la ciudad de Culiacán.
