El camarón seco de Escuinapa deleita a culiacanenses con el emprendimiento de María Rembao
María Rembao González ha dedicado su vida a preservar el negocio familiar del camarón seco, superando obstáculos y desafíos en su camino


Culiacán, Sinaloa.- Desde muy pequeña, María Rembao González aprendió a ganarse la vida con la venta de camarón seco, un producto que ha preservado su auténtico sabor gracias a su proceso artesanal.
Su aventura inicia en Palmillas, Escuinapa, donde María desde niña ayudaba a cocer y secar el camarón al sol en el patio de su casa. Luego, vendía el producto a los viajeros que pasaban por la carretera internacional 15. Fue allí donde nació su amor por el negocio, que más tarde se convertiría en el motor de su vida.
Hace más de 40 años, en busca de una vida mejor, María emigró a Culiacán. A pesar de las dificultades que trajo consigo esta mudanza, nunca dejó de lado su pasión por el comercio del camarón seco.
¡Recibe las últimas noticias!
En un principio, inició vendiendo el crustáceo en algunos cruceros de la ciudad y a los años estableció un pequeño punto de venta cerca de la UAdeO, pero la vida le puso obstáculos, llevándola a alejarse temporalmente de su emprendimiento debido a momentos complicados.

A pesar de las dificultades, su fortaleza y perseverancia la impulsaron a emprender de nuevo. María recuerda cómo, tras enfrentar una quiebra, empezó a trabajar en labores domésticas. Fue allí donde conoció a un hombre dueño de sembradíos de camarón en Navolato, quien le pidió que le ayudara a cocer dos toneladas de camarón.
Aunque parecía una oferta prometedora, el trato nunca se cumplió y el hombre solo le entregó tres maquetas de camarón como pago, pidiéndole hasta que dejara de trabajar en su casa. Con el tiempo, María descubrió que la verdadera intención del señor era apoderarse de su receta secreta.
A pesar de la amarga experiencia, María no se dejó vencer. Decidió retomar su emprendimiento con las tres maquetas de camarón que le quedaron como pago. Con determinación, usó esos recursos para seguir adelante en su negocio.
María, ha logrado mantenerse firme en su camino gracias a su amor por lo que hace y el apoyo de sus clientes, quienes valoran el sabor único del camarón que oferta. Y asegura que muchos lo disfrutan como botana, mientras que otros lo incluyen en sus recetas, como las tradicionales tortitas de camarón.
Hace seis años, María estableció un nuevo punto de venta en Culiacán, sobre el bulevar San Ángel, cerca de la entrada principal de la Escuela de Veterinaria de la UAS. Desde ese entonces, ofrece su delicioso camarón seco de calidad y a un precio accesible.
Ante las bajas ventas, por la difícil situación que se vive en Culiacán, María continúa con la misma pasión de siempre, luchando cada día por ofrecer a sus clientes un producto que lleva consigo el sabor de su vida y su historia.
“Las ventas están muy bajas, y más ahora por la inseguridad que hay en Culiacán. Siempre salgo de mi casa con toda la esperanza y fe de que Dios me ayudará, al menos para sacar para comer”, expresó la vecina de la colonia 5 de Febrero.
María se siente orgullosa de su trabajo, pues ha logrado sacar adelante a sus hijos. También con sacrificios y dedicación junto a su esposo (QEPD), construyó su casita, modesta pero llena de amor.
María Rembao González es un claro ejemplo de que la pasión, la fortaleza y la esperanza nos impulsan a seguir adelante, incluso en los momentos más difíciles. Su historia de resiliencia inspira a nunca rendirse y seguir luchando por nuestros sueños.
Hoy, gracias a su esfuerzo y perseverancia, sigue llevando el auténtico sabor de Escuinapa a todos quienes tienen el placer de probar el delicioso camarón seco. Su trabajo de mucho esfuerzo es una botana para los consumidores.