Lealtad al gobierno en turno
Se tiene la mala costumbre desde hace años de criticar y hablar mal del gobierno en turno
Se tiene la mala costumbre desde hace años de criticar y hablar mal del gobierno en turno.
Federal, estatal y municipal.
Se ha convertido en deporte el burlarse, criticar, denigrar y juzgar a los gobernantes en funciones.
Nos reímos, juzgamos y criticamos con suma rigurosidad casi todo lo que hacen los funcionarios.
Parece una costumbre inofensiva, pero no lo es, de hecho es muy dañina.
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Muchos lo hacen por ser de partidos perdedores, como resentimiento o venganza.
Otros lo hacen para desacreditar y restarle fuerza a las autoridades, para poder seguir delinquiendo.
Los criminales siempre hablan mal del gobierno.
Al criticar no nos damos cuenta que estamos perjudicándonos nosotros mismos.
Un gobierno débil es malo para todos, no puede operar bien y se le dificulta cumplir sus funciones.
Y por lo tanto todos los ciudadanos salimos perjudicados.
El civismo y el patriotismo están escasos.
Si queremos tener un mejor país y mejores estados tenemos que apoyar a los gobernantes en turno.
Sean del partido que sean.
Los que gobiernan ganaron la elección, son nombrados por todos y están para servir a todos.
Seamos verdaderos demócratas, si ganó nuestro candidato que bien, si ganó otro también está bien.
Merecen nuestro apoyo.
México no avanza por la desunión y el encono interno.
Desgraciadamente muchos medios son culpables de fomentar esta polarización.
Por satisfacer sus egos mezquinos o económicos muchos medios causan desunión.
Les divierte ver como nos peleamos los mexicanos.
No caigamos en sus redes.
Seamos conscientes que nos conviene siempre apoyar al gobierno en turno.
Es por nuestro propio bien, por el bien de todos.
No hay gobernante perfecto, todos hacen cosas malas y buenas.
Apoyemos en las cosas que nos parezcan buenas.
Ignoremos las malas.
Si el gobernante es corrupto denunciemos a la autoridad competente.
Pero no nos dejemos llevar por mitotes y malas intenciones de otros.
Todos somos dignos de confianza hasta que no se demuestre lo contrario.
Seamos leales a nuestra tierra, a nuestra gente.
Los únicos enemigos son los malos, los criminales, los delincuentes.
Todos los demás somos gente buena.
Seamos leales a los gobernantes en turno.
Aportemos nuestro apoyo y grano de arena al progreso del pais.
