El principio básico de la educación del amor radica en el humanismo y deja al individualismo por un lado. El amor ayuda a pegar nuevamente las piezas rotas para fortalecer a la persona y cambiar una sociedad.

La educación del amor

Para San Agustín, todas las polémicas sobre el bien y el mal; el pecado y la virtud se resumían en su filosofía: "Ama y haz lo que quieras" porque sólo a través del amor el mundo evoluciona en armonía y nosotras con él.

Hoy, el mundo y el hombre están rotos en miles de fragmentos... Y todo lo que se separa, se convierte en antagonista.

Hoy sólo nos "une el interés y la utilidad". El individualismo enterró al humanismo, y la tecnología hizo a un lado a la sabiduría.

¿Podemos poner punto final y empezar de nuevo? Yo pienso que sí. Porque como decía Einstein: "si lo podemos imaginar, lo podemos lograr".

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